El diputado que protagonizó una escena sexual en plena sesión incluso fue empleado de la institución millonaria.
Ameri era barrabrava de River y perdió un ojo peleando con la Policía
Juan Emilio Ameri tiene pasado como barrabrava de River. El diputado por el Frente de Todos por Salta protagonizó un escándalo sexual en medio de una sesión virtual cuando su esposa apareció en cámara y el funcionario le bajó la remera y le dio un beso en el pecho.
Si bien Ameri está radicado en Salta, nació en Buenos Aires el 25 de mayo de 1973. Fanático del Millonario, durante su juventud fue un extremo simpatizante muy vinculado con la facción más dura de Los Borrachos del Tablón.
De hecho, el actual diputado (que se afincó en Salta porque debió huir de Buenos Aires) perdió la visión del ojo izquierdo en una batalla entre los simpatizantes de River y la Policía, en un Superclásico contra Boca disputado en la Bombonera. Aquella noche del 8 de abril (inolvidable porque Riquelme metió un gol y se lo dedicó a Mauricio Macri haciendo el Topo Giggio), Ameri recibió un perdigón de goma en su ojo y los médicos no pudieron hacer nada para evitar las consecuencias.
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A partir de ese accidente, Ameri (que también tiene denuncias por acoso y abuso sexual) fue contratado por River como empleado en el departamento de marketing. Tenía 27 años y no trabajaba. En aquel entonces, el Millonario estaba bajo la gestión de David Pintado, un recordado dirigente que presidió el club durante 4 años y murió en el 2018 a los 92 años.
En una entrevista publicada por el diario La Nación el 28 de abril del 2001 bajo el título "Volver a empezar después de la violencia en una cancha", Ameri declaró que "quiero agradecerles a todos los dirigentes de River, porque estaba desempleado y mi preocupación era cómo iba a conseguir un trabajo con la visión disminuida. Hasta que un día me llamó el presidente David Pintado y me dijo: 'Querido, te voy a dar una buena noticia y cuando te recuperes vas a trabajar acá, con nosotros'. Esta fue una de las cosas más grandes que me pasó en la vida. Nunca voy a terminar de agradecerles. Si fuese por mí, seguiría acá para siempre. Ellos me sacaron del pozo y no tenían la obligación de hacer nada".
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