Un informe global dio cuenta de que, por la pandemia, en el mundo los padres dejaron de vacunar a sus hijos. Un retroceso gravísimo que en Mendoza no sucede.
En Mendoza no bajó la vacunación a los niños como en el resto del mundo
El lunes, el informe anual Goalkeepers 2020, que realiza la Fundación Bill y Melinda Gates, sobre los indicadores de desarrollo mundial, alertó que "la pandemia acabó con 25 años de desarrollo de vacunas en 25 semanas."
En este sentido, el informe dio cuenta de una caída en la vacunación que llegó a los niveles de 1995, sin embargo, en Mendoza esa caída fue muchísimo menor y, hasta ahora, estaría rondando el 8% respecto al año pasado.
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"Todos los países han pasado una etapa de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio que impidió que las personas salieran. Nosotros en los primeros 15 días tampoco tuvimos vacunación y en abril tuvimos el inicio de la campaña de la vacunación antigripal y en ese momento fue todo gripe y de grupos de riesgo", precisó Iris Aguilar, directora de Inmunizaciones de Mendoza.
Iris Aguilar junto a la ministra de Salud, Ana Nadal
Aclaró que, si bien durante las primeras etapas del aislamiento las personas no se animaban a circular, de a poco, a medida que se fueron liberando actividades, los mendocinos comenzaron a cumplir con el esquema de vacunación.
"A nosotros lo que más nos preocupaba es que Mendoza tiene la vacunación escolar como estrategia para los chicos de jardín y de sexto grado y, al no haber clases, eso está resentido", agregó.
Pero el ministerio de Salud comenzó en junio con distintas estrategias para captar a los grupos que suelen esperar a que se vacune en las escuelas, y tuvieron buenos resultados.
No esperar para vacunar
Aguilar insistió en comunicar a los padres que no esperen que se vacune a sus hijos en la escuela el año que viene "ya que el año que viene tenemos que vacunar a los que corresponde ese año".
Bebés, niños de 5 y de 11 años, tienen que vacunarse
Por eso, destacó que "es muy importante llevar a los chicos a vacunar, sobre todo a los menores de 2 años y a los de 5 años, porque los más chiquitos no tienen ninguna protección y los de 5 años también porque son refuerzos muy necesario. No se deja para mañana la vacuna", subrayó.
"Cuando se abran las fronteras vamos a tener de nuevo sarampión, difteria, enfermedades que no tenemos gracias a las vacunas. Como decimos en Salud: ?estamos a un avión de distancia' de tener enfermedades que acá no hay, pero si estamos vacunados, no nos va a pasar nada."
En cuanto a los números, Aguilar destacó que en los menores de 24 meses el impacto de la caída en las vacunaciones ha sido mucho menor que en las otras etapas, pero "en promedio vemos comparado con el año pasado a esta altura del año una caída que no excede el 7 o el 8 por ciento".
Para Aguilar, la diferencia con otras partes del mundo es que "en Mendoza está muy arraigado el tema de la inmunización en los padres y, aunque vemos que algunos tienen miedo de ir a un centro de salud, tienen que saber que los lugares de vacunación son seguros y muy higiénicos. Se aplican todos los protocolos de cuidado y desinfección."
Agregó que sólo se deja entrar a un adulto con el niño y el trámite no debe durar más de nos 15 minutos.
"La salida a vacunar a los chicos tiene que ser como la salida al supermercado. No se puede postergar y se va sin turno y sí respetando el día del DNI que le corresponde al adulto".
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