Habían hecho una reserva para disfrutar el domingo en Perdriel, pero sólo fueron a beber. Hicieron un papelón, fueron echados y no podrán volver a entrar al lugar.
Clientes borrachos maltrataron al personal de una bodega de Luján
Un grupo de inadaptados (foto portada ilustrativa) concurrió este domingo a una bodega en el distrito lujanino de Perdriel, se embriagó y todos terminaron siendo echados del lugar por su desubicado comportamiento que perturbó a los trabajadores y a los clientes que se encontraban en el lugar.
La historia la vivió en carne propia una empleada del lugar que trabaja en el sector de Turismo de la bodega ubicada en Luján: "Tuve que echar literalmente y ya en malos términos a una gente muy borracha en la bodega. Como si tuvieran 12 años, vomitando, saliendo de un boliche".
"Incumplieron con todos los protocolos desde el momento en que llegaron, se cambiaban de mesa, se abrazaban, cero barbijo. Le faltaron el respeto al personal que no hizo más que cumplir todos sus caprichos. Fueron expresamente a ponerse en pedo y encima tuvieron el tupé de quejarse. Me llevaron a un estado de nervios extremo y me pusieron en una situación que espero nunca más tener que vivir", contó la joven en su cuenta de Twitter.
"No sólo arruinaron mi día, sino el de toda la otra gente que fue a almorzar. Un atropello a absolutamente todo, creyéndose los reyes del mundo. Me da vergüenza ajena que sean mendocinos. Este tipo de gente es odiada por todo local gastronómico. No sean jamás así, dan lástima", remarcó la empleada.
"Mientras a ellos les parecía muy gracioso, a mí me agotaron toda la energía que me quedaba. Estando muy triste por no poder ver a mi familia y amigos. Dándole el lugar a ellos que sí pueden hacerlo y se comportan así", expresó ofuscada la empleada del lugar.
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La bodega reabrió sus puertas el pasado sábado 6 de junio, días después de que el gobierno provincial habilitó la actividad de los locales gastronómicos más allá de las modalidades take away y delivery. Desde entonces el local ha tenido una aceptable cantidad de visitantes.
Ante la consulta, la chica prefirió no dar los nombres de los inadaptados del pasado domingo: "No estoy segura de que sea legal difundir sus datos, así que prefiero no hacerlo". Sin embargo, la joven aseguró que entraron en la lista negra del lugar y su ingreso quedó vetado.
Las bodegas son muy concurridas por los mendocinos que las eligen como una actividad para salir de sus hogares
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