Ser gourmet no se trata comer caro en un lugar bonito y con ingredientes difíciles de conseguir. Se trata de comer con alta calidad.
No todo es caretearla: ¿qué es ser "gourmet" realmente?
Para que alguien se considere como tal, debe poseer un cúmulo de experimentados años y conocimientos en la materia gastronómica, como sostener un estilo de vida cosmopolita, ser gustoso por los mejores sabores y, por lo tanto, selectivo.
La Real Academia de la Lengua Española lo define como: Persona entendida en gastronomía, aficionada a las comidas exquisitas.
Pero más allá de lo que dice el diccionario, pude decirse que una persona gourmet es aquella persona con gusto delicado y exquisito paladar, conocedor de los platos de cocina significativamente refinados, que tiene la capacidad de ser catador y probar el nivel de sabor, fineza y calidad de ciertos alimentos y vinos.
"Ser gourmet no se trata de caretear y comer caro en un lugar bonito"
Suele suceder que quien adopta este estilo de percibir la vida, no solamente se enfoca en la comida, sino (en ocasiones) también su gusto se extiende por el buen vestir, los artículos de lujo, la buena música y los viajes.
Foto: www.greenandgreenco.wordpress.com
Ser gourmet no se trata de caretear y comer caro en un lugar bonito y con ingredientes difíciles de conseguir. Se trata de comer con alta calidad, con materias primas seleccionadas, correcta manipulación y condiciones bromatológicas profesionales.
Este catador de comida distingue en sus observaciones si un plato es “Delicatessen", es decir, si va de acuerdo con las exigencias que requieren las debidas preparaciones de los productos alimenticios de la más alta gastronomía.
Existe una amplia variedad de comidas y bebidas también llamadas “gourmet”: hay desde embutidos, jamones, quesos, caviares, pastas, carnes, aves, mariscos, salsas, mermeladas, panes, semillas, granos, chocolates, postres, vinos, licores, cafés y hasta helados. Y aún podría mencionar algunos más.
En Mendoza existen negocios que se inauguran con la intención de captar clientes que practiquen este peculiar modo de vida, los hay desde bares hasta restaurantes pasando por tiendas y bodegas. Existen también varios medios de comunicación especializados en esta materia, webs, blogs, guías especializadas, programas de TV y de radio e incluso ferias dedicadas exclusivamente a este tipo de público donde se pueden probar diferentes productos, en resumen un disfrute para los sentidos.
Sobre los productos
“En general las personas llaman gourmet erróneamente a muchas cosas, los ingredientes y los restaurantes. Expresiones como restaurante gourmet son bastante repetidas”.
Decir que un producto es gourmet es porque va muy ligado a lo artesanal y se caracteriza porque es escaso. Otra cosa determinante es la denominación de origen: "Cuando un producto cumple con la denominación de origen, significa que cumple con unos estándares de calidad definidos. Un ejemplo es la 'fleur' de sal (granos de sal que se cristalizan en una estructura parecida al hielo). En la Argentina tenemos de la Patagonia, es una capa muy delgadita que concentra lo mejor de la sal, así que se recoge a mano, con un rastrillo y se envasa sin que medie un solo proceso químico o industrial".
Pero lo cierto es que muchos se aprovechan productos convencionales, comunes y corrientes y les ponen envases bonitos y un precio más alto para que el consumidor lo perciba como "gourmet". Pero no lo es.
Y al final, la única manera de saber si un producto es gourmet es probándolo.
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