Pero como la edición se grabó a mediados de 2018 y fue posponiendo su estreno hasta este 1 de marzo, poco antes de la cuarentena obligatoria, la producción hizo todo lo posible para evitar spoilers, pero el certamen en las redes se vive como su fuera en tiempo real.
Y fue precisamente en las redes lo que tanta polémica generó la presunta experiencia laboral de Samanta Casais, una de las ahora finalistas, algo que choca con el requisito de amateur que deben cumplir los participantes para estar en el programa.
Es que la semana pasada se conoció que Samanta, porteña, de 29 años, trabajó un tiempo en Café San Juan (reconocido local gastronómico ubicado en San Telmo), tuvo una participación como invitada en un programa televisivo y también llevó adelante su propio emprendimiento pastelero.
samanta: ayyy no lo puedo creer estoy en la final also samanta: jajajaa soy profesional obvio que iba a ganar inútiles besitos mil besitos pic.twitter.com/JRkYoDsoEV
La polémica decisión se tomó tras la filtración del supuesto patrimonio de Marcelo Polino y las críticas a la organización de los Martín Fierro Latino Miami 2025. Ambas podrán apelar la drástica medida.