Es español y se presentó como voluntario en el ensayo clínico de la Universidad de Oxford. En diálogo con TN, adelantó que en agosto sabrán si es efectiva.
Qué dijo el enfermero que probó la vacuna contra el coronavirus
Joan Pons es español pero vive en Reino Unido, donde lleva más de 20 años trabajando como enfermero. Tras recibir un correo electrónico de la Universidad de Oxford en el que solicitaban voluntarios para la vacuna del coronavirus, decidió postularse y hace 10 días fue inyectado por primera vez.
"Mi cuerpo reaccionó muy bien, no tuve ningún problema, solo un poco de dolor en el brazo como si me hubieran dado un golpe, pero desapareció en 24 horas", contó en diálogo con TN.
El hombre está casado y tiene tres hijos, y esta decisión lo llevó a que su esposa le dejara de hablar durante varios días. Sin embargo, no lo dudó, ya que trabaja en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un hospital y le tocó vivir "la crueldad de este virus".
"Me leí toda la documentación y decidí que, como ya estaba harto de este virus tenía que hacer algo, y eso era aportar mi granito de arena", reconoció Pons, aunque confesó que cuando leyó "shock anafiláctico que puede producir la muerte" entre los posibles efectos adversos, sintió miedo.
"La verdad es que es una prueba y no se sabe exactamente cómo vas a reaccionar", confesó pero contó que de todos sus compañeros que también se presentaron como voluntarios, ninguno sufrió efectos adversos. Esta situación le dio esperanzas de que la vacuna probablemente sea efectiva y "que pueda estar lista para Navidad".
"La vacuna es la única posibilidad de salir de este stand by en el que estamos ahora. Por eso no lo dudé. Tardé 24 horas en decir que sí", reconoció Pons, y auguró: "El 2021 tiene que ser mucho mejor que 2020".
El hombre le contó a TN que para poder evaluar si la vacuna es efectiva, el voluntario debe infectarse. Por eso, todas las semanas le hacen un control en la nariz y en la garganta para ver si da positivo de COVID-19. Según explicó, como trabaja solo con pacientes con coronavirus, tiene altas probabilidades de contagiarse en los próximos seis meses.
"Es muy difícil estar siempre alerta y que no te pase nada, aquí en Inglaterra hubo muchos sanitarios que se contagiaron. Más de 300 se murieron, y el número es similar en España", reveló Pons.
Los científicos de Oxford están esperando que alguno de estos voluntarios, que también están en Brasil y en los Estados Unidos, se contagien el virus. Recién cuando eso suceda podrán evaluar si realmente la vacuna está atacando al SARS-CoV-2 y frenándolo antes de que ataque el cuerpo del paciente.
Según Pons, en agosto ya podrían saber si es efectiva y se están asegurando que la vacuna no sea cara. "El acuerdo es que sea comercializada a precio de costo y que cueste 2 euros. Están empezando a producirla ahora para que ya pueda salir a la calle en septiembre- octubre. Así que solo es cuestión de cuántas pueda producir al día", señaló el enfermero.
Además, los investigadores deben realizar un estudio más largo para evaluar si la inmunidad dura toda la vida o si es necesario vacunarse una vez al año, como sucede con la gripe.
Más allá de todo, Pons se mostró esperanzado en la velocidad con la que están trabajando los expertos del mundo, y aseguró: "Si la de Oxford no resulta efectiva creo que va a haber alguna de otro país en la que sí lo sea. Tengo mucha confianza en los científicos de que tendremos vacuna para Navidad".