El aporte estatal para el pago de la mitad de los salarios sería reformulado debido a la escasez de recursos.
El subsidio ATP podría pasar a ser un préstamo blando
El Gobierno analiza reconvertir el subsidio estatal para el pago del salario de empresas por la parálisis económica en préstamos blandos para este mes. La media comenzó a evaluarse teniendo en cuenta el agotamiento de los recursos del Estado y por otro lado, para delimitar el alcance de la ayuda y llevar ese dinero a otras actividades afectadas por el aislamiento.
Según publicó Ámbito hasta el momento la Asignación de Emergencia para el Trabajo y la Producción (ATP) alcanzó a 1,8 millones de trabajadores y se prevé que al finalizar la liquidación de mayo superará los 2 millones de personas, algo menos que los 2,5 millones alcanzados con los ingresos de abril.
La tercera etapa del ATP ya está siendo analizada desde el Ministerio de Economía. Desde la cartera avanzaron este último viernes para regionalizar y sectorizar el beneficio, a lo que se podría sumar la reconvención de créditos para empresas que ya estén facturando.
Desde el Gobierno entienden que el subsidio cumplió su cometido en las empresas más vulnerables: asistir a las más afectadas y evitar la pérdida del empleo privado. Por eso, y luego de cumplidos los pagos de abril y mayo, aseguran que llegó el momento reformular el beneficio.
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Una de las posibilidades es que las empresas que sigan sin poder trabajar puedan recibirlo, pero quienes estén en condiciones comiencen a obtener créditos blandos.
El último mes el universo de beneficiarios se amplió al anularse el tope de 800 empleados. Sin embargo, los requisitos se endurecieron debido a que las empresas deberán abstenerse por dos años de operar con paraísos fiscales, distribuir utilidades o hacerse de dólares. Esto hizo que unas 300 empresas decidieran devolver el dinero obtenido.
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