En Minneapolis cientos de manifestantes desafiaron un toque de queda decretado por las autoridades y, como en las últimas tres noches, repitieron esta madrugada los incendios, actos de vandalismo y saqueos de comercios.
Saqueos, incendios y enfrentamientos en EEUU por el racismo policial
Disturbios por el crimen del afroamericano George Floyd a manos de la policía en Minneapolis se extendieron hoy por todo Estados Unidos, con incendios, saqueos y enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden, y el Pentágono ordenó a unidades militares de policía estar listas para desplegarse en esa ciudad de Minnesota.
En Minneapolis cientos de manifestantes desafiaron un toque de queda decretado por las autoridades y, como en las últimas tres noches, repitieron esta madrugada los incendios, actos de vandalismo y saqueos de comercios.
Uno de los epicentros de las protestas fue la comisaría del Quinto Distrito, después de que en la noche del jueves incendiaran el edificio de la comisaría del Tercer Distrito, frente al cual también se concentraron anoche manifestantes, algunos de ellos arrodillados y con el puño en alto.
El origen de las protestas fue el crimen del afroamericano George Floyd, de 40 años, que falleció el lunes cuando era detenido bajo la sospecha de haber intentado usar un billete falso de 20 dólares en un supermercado.
En videos grabados por transeúntes se ve a uno de los cuatro agentes que participaron en la detención, y que luego fueron expulsados del cuerpo, sometiendo a Floyd en el suelo, subido sobre él y presionándole con su rodilla en el cuello durante varios minutos.
"Por favor, por favor, por favor, no puedo respirar. Por favor", se escucha a Floyd decir mientras agoniza.
Los disturbios de esta madrugada ocurrieron pese a llamados a la calma de líderes civiles de la comunidad afroamericana y pese a la confianza de las autoridades de que los ánimos se calmarían después de que ayer la fiscalía acusase formalmente al agente Derek Chauvin, el policía que presionaba el cuello de Floyd con su rodilla, de asesinato y homicidio imprudente.
Al ex policía, que podría ser condenado a hasta 12 años de cárcel, se le ha fijado una fianza de medio millón de dólares.
A la policía se le habían sumado ayer 500 miembros de la Guardia Nacional por orden del gobernador de Minnesota, Tim Walz.
Pero luego de otra noche de caos, Walz dijo esta madrugada que activará el despliegue de más de 1.000 guardias nacionales adicionales y que consideraba pedir ayuda al Gobierno federal.
"No nos dan los números. No podemos arrestar a personas cuando (apenas) estamos tratando de defendernos", dijo.
CNN y otros medios estadounidenses informaron que el Pentágono ordenó hoy al Ejército poner en alerta a varias unidades de la policía militar para que estén lista para desplegarse en Minneapolis en menos de cuatro horas si así lo ordena el presidente Donald Trump.
Trump muchas veces se puso del lado de la policía en otros casos de uso de fuerza letal, pero ayer dijo que el video que captó la muerte de Floyd era "impactante" y que había hablado con la familia de la víctima para expresarle sus condolencias y asegurarles que el Departamento de Justicia hará de la investigación de su muerte una prioridad.
Su rival demócrata en las elecciones de noviembre próximo, Joe Biden, dijo también ayer que había ofrecido sus condolencias a la familia de Floyd.
"Necesitamos un verdadero liderazgo ya, un liderazgo que siente a todos a una mesa para que podamos tomar medidas para erradicar este racismo sistemático", señaló.
En el estado de Gerogia, el gobernador Brian Kemp declaró hoy el estado de emergencia y ordenó el despliegue de 500 miembros de la Guardia Nacional estatal "para proteger a la gente y las propiedades" en la ciudad de Atlanta.
Kemp hizo el anuncio luego de que grupos de manifestantes rompieron vidrieras de comercios y se enfrentaron con los agentes antidisturbios, que los repelieron con gases lacrimógenos, en el centro de Atlanta, de Georgia, cerca de la sede central de la cadena CNN.
Algunos manifestantes lanzaron piedras contra el edificio de CNN e incluso lo vandalizaron con pintadas.
En medio de la confusión, varios vehículos de la policía que estaban en el lugar fueron blanco de las piedras y otros incendiados.
En Los Ángeles se produjeron enfrentamientos entre la policía y grupos de manifestantes, que cerraron calles y destrozaron vehículos.
En Nueva York las protestas se centraron sobre todo en Brooklyn y Manhattan, donde también hubo choques con las fuerzas del orden que se saldaron con decenas de detenciones.
Las acciones más violentas tuvieron lugar en Brooklyn, donde los participantes quemaron un patrullero.
También en Washington, la capital, una manifestación frente a la Casa Blanca que comenzó siendo pacífica derivó en escaramuzas con los policías y agentes del Servicio Secreto y el lanzamiento de piedras y otros objetos contra la residencia presidencial.
Los manifestantes en más de una ocasión derribaron algunas de las barricadas instaladas frente a la Casa Blanca y la policía realizó varias detenciones.
También hubo protestas, en algunos casos también violentas, en otras ciudades.
Una persona fue asesinada en Detroit, Michigan, antes de la medianoche cuando alguien abrió fuego desde una camioneta contra una multitud de manifestantes, dijo la policía.
En Portland, Oregon, manifestantes irrumpieron en una comisaría y la incendiaron parcialmente.
En Richmond, capital de Virginia, manifestantes prendieron fuego un patrullero y un colectivo.