El intendente de Guaymallén hace equilibrio entre la salud y la economía. Apela al autocuidado y advierte que ya llegó el final de la cuarentena porque "la gente no banca más el encierro".
Marcelino quiere abrir los shoppings y vaticina que todos nos vamos a infectar
"Es fácil establecer las cuarentenas pero es muy difícil salir de ella", dice el persistente Marcelino Iglesias cuando comienza a hablar de cómo enfrentamos la pandemia en Mendoza.
Es un experimentado político pero estos tiempos de coronavirus lo han retrotraído a especialidad profesional primigenia como bioquímico y experto en las políticas de salud (fue autor de la ley de Salud Reproductiva como diputado y años más tarde director de OSEP). A eso le ha sumado su mirada de gestor público en este caso del municipio más poblado de Mendoza.
Todo eso se vio en el programa de TV on line "Al rojo vivo" cuando señaló que el jueves 7, en la reunión de los seis intendentes del Gran Mendoza con Rodolfo Suarez él pidió "la apertura de los centros comerciales". Iglesias piensa en el Mendoza Plaza Shopping. Dice que "es mucha más fácil controlarlos sin cines y sin patios de comida en esta etapa porque tienen un protocolo muy serio y tiene solo un par de entradas". Pero se le negó este pedido, por lo menos en esta etapa.
La verdad virulenta
"La realidad hay que decirla, y si bien (el virus) no está descontrolado, ni mucho menos, con el tiempo habrá muchos más casos. El problema lo tienen el AMBA y Chaco, porque en Río Negro y Tierra del Fuego hubo mucho pero lo han controlado", diagnosticó el intendente.
La actitud de Iglesias en estos días es de un profeta gritando lo que vendrá. Así lo hizo mirando las cámaras hablando a la audiencia que miraba el programa por YouTube.
"Esto lo quiero decir de frente: va a venir un pico, más alto o bajo, más pronto o más lejos, no quiero ser como Ginés (González García) que le erró al bochazo. Pero va a llegar ese pico a mediados o fines de junio, más tarde o temprano llegará. Estas cuarentenas sirven para preparar la conducta social de la gente, que creo que ya está. Y también para preparar el sistema de salud", advirtió.
Luego sacó cuentas rápido y concluyó que hay en Mendoza 3 enfermos con respirador mecánico y (ahora) 27 personas con coronavirus en el sistema de salud, pero que podrían estar en sus casas haciendo una cuarentena estricta. Y luego volvió a vaticinar que en el futuro ese tipo de pacientes terminarán en sus viviendas porque el sistema "tendrá que elegir" a quién contener.
Cómo esperamos a la pandemia
Recordó Iglesias que Mendoza comenzó con las medidas preventivas y restrictivas una semana antes que la Nación y que el gobernador fue criticado desde la Casa Rosada por esa premura, pero que "al final terminaron haciendo lo mismo que nosotros".
"No me gustan los DNU (de Alberto Fernández) porque hay un fuerte centralismo", volvió apuntar en esta mirada punzante de la situación política y pandémica. "Están muy asustados en Buenos Aires porque en las villas, asentamientos o barrios populares ya ingresó el virus y es mucho más fácil infectarse y acá va a pasar lo mismo, porque va a pasar lo mismo", sumó con énfasis para que nos curemos de espanto.
Para Iglesias debemos hacernos a la idea que vamos ir yendo camino al contagio con mediana intensidad mientras no haya una cura definitiva. Por eso apuntó a los dirigentes porteños y bonaerenses que rigen la normativa de la pelea contra el virus. "Ellos se asustaron un poco y nos frenaron a todos -advirtió-. Y la verdad que no es así, la dinámica epidemiológica es por zona o región. Ahora tenemos problemas hasta para ir a otros departamentos como los de la zona este", especificó.
Punto por punto y entre comillas
No damos más. "Tenemos que tener un equilibrio. La gente está violando la cuarentena porque las normas son de cumplimiento, cuando son lógicas. La gente no banca más estar encerrados, afortunadamente nos tocó un buen tiempo climático".
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De buen uso y costumbre. "El uso de tapaboca o máscaras faciales, el distanciamiento social y el lavado de manos generó una conducta. Ha habido una gran respuesta de la gente por temor y conciencia pero sin llegar a medidas exageradas de algunos que promueven demagógicamente fumigar barrios y que no tienen nada que ver con las normas que fijan el Ministerio de Salud y la OMS".
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Coronavirus "democrático". "Les quiero avisar a todos que los empleados municipales no son inmunes al coronavirus y como ya se han infectado los agentes de salud, también se van a infectar periodistas, recolectores, administrativos, abogados, contadores y albañiles, todos nos vamos a infectar".
¿Cuándo y cuánto nos vamos a enfermar? "Hay que ver la película y esta película será larga como de un año y medio y a lo largo de ese tiempo las curvas más plana o con picos agudos se van a ir emparejando. Soy partidario que se vaya volviendo a la normalidad en que se haga hincapié en el autocuidado. La conciencia y la responsabilidad de cada uno hacen que nos autocuidemos. Hay que ser docencia, soy intendente y no me creo un sheriff para andar mandoneando ni controlando".
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Tener miedo. "Le tengo miedo al coronavirus, pero lo que está pasando con la economía es terrible. Los municipios no sabemos hasta cuándo vamos a poder pagar los sueldos y a nuestros proveedores.
Conclusión temporal. "Hay que buscar una estratégica armónica que preserve la salud y que ponga a andar la economía porque al final habrá muchos problemas de salud derivados de la economía".