El descubrimiento puede abrir la puerta a la producción de vinos personalizados.
La percepción del sabor frutal del vino puede variar según la saliva
Un estudio afirma que la percepción del sabor frutal del vino puede variar según la saliva del consumidor. El resultado puede abrir la puerta a la producción de vinos personalizados y remarcaría que todos sentimos algo distinto al momento de probar la bebida nacional.
Se trata de una investigación realizada por investigadores de las universidades Politécnica y Complutense de Madrid, el Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación (CIAL, CSIC-UAM) y el Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos y Nutrición (ICTAN-CSIC), la cual afirma que el aroma del vino puede ser distinto dependiendo el flujo y la composición de la saliva.
El análisis buscaba comprobar si había relación entre la intensidad percibida del aroma retronasal asociado a cuatro descriptores frutales de vinos y el flujo y la composición de la saliva de los participantes. Los resultados indicaron importantes diferencias en ambos parámetros y en la intensidad de los sabores.
Además, el estudio arrojó una fuerte correlación entre el flujo salival y la percepción del aroma. Es decir que los que tuvieran mayor flujo salival, perciben con mayor intensidad aromática.
Ver: En medio de la pandemia, una bodega vendió un contenedor a EE.UU
En ese sentido, la coautora Carolina Chaya, una de las investigadoras que llevó a cabo el estudio, indicó que "los resultados obtenidos se podrían aplicar en la elaboración de vinos más personalizados y dirigidos hacia segmentos de consumidores con características orofisiológicas específicas, como por ejemplo, consumidores sénior que poseen un menor flujo salival".
Ver: Seis empresarios vitivinícolas responden por Whatsapp 3 preguntas clave