La joven inició la protesta en la Unidad Penal de Mujeres de Paraná.
Nahir Galarza lidera una huelga de hambre para que habiliten visitas en prisión
Desde el pasado martes 28 de abril en la mañana, la convicta Nahir Galarza, quien cumple condena en el Penal Número 6 de Mujeres de Paraná por el asesinato de su novio Fernando Pastorizzo, inició junto a otras compañeras una huelga de hambre en reclamo por el regreso de las visitas.
El régimen en las cárceles del país fue postergado para evitar el riesgo de contagio de coronavirus Covid-19, siendo uno de los causales de extrañas situaciones en los penales de toda la Argentina. En la capital entrerriana, las internas firmaron un acta en la que dejan constancia que están en huelga por la prohibición.
Según indicaron fuentes penitenciarias, la joven Galarza bajó dos kilos en los últimos dos días. "Del mismo modo que al penal entran muchas personas, entre ellas la psicóloga, el personal penitenciario, la profesora de educación física, y no toman recaudos, a las visitas pueden ponerle barbijo y tomarles la temperatura", argumentaron las reclusas en la solicitud escrita que enviaron, asegurando que la medida continuará hasta que tengan una respuesta favorable.
La semana pasada el abogado defensor de Nahir Galarza, José Ostolaza, pidió vía online la excarcelación de su defendida por considerar que no había riesgo de fuga. Sin embargo este lunes le fue negado ese beneficio, al día siguiente, la joven inició con la huelga.
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