Una profesora de danza clásica, un profesor de guitarra y un dúo de cantantes y DJ cuentan sobre la experiencia de adaptarse en tiempos de coronavirus y seguir llevando el sustento a casa.
Fiesta, danza y guitarras online: los "profes" reinventados por la cuarentena
Una pandemia nunca está en los planes de nadie. Nunca. Ni hasta el más dramático de los seres humanos piensa que un fenómeno así se interpondrá en sus planes. Eso solo pasa en las películas.
Pero, bien dice la frase que la realidad supera a la ficción y acá estamos. Pandemia por coronavirus. Los argentinos llevamos más de un mes encerrados en nuestras casas por una cuarentena obligatoria, la única medida efectiva hasta ahora para frenar el contagio en nuestro país.
El problema sanitario es gravísimo, pero los efectos colaterales son igual de complejos. La economía está en terapia, con respirador y pronóstico reservado y los más afectados han sido los cuentapropistas.
Trabajadores sin un sueldo fijo que brindan un servicio, enseñan una disciplina o venden una experiencia en forma particular, en la cual la presencia física es clave, se vieron en la necesidad de reinventarse para asegurarse el ingreso a sus hogares.
Living familiar y salón de ballet
Paula Giuffrida es bailarina y profesora. Enseña Historia de la Danza y Técnica Clásica en Fundación por el Arte; es tallerista en el Teatro Independencia ( taller de Danza Clásica) dentro de los espacios gratuitos concedidos por Cultura y el teatro. También enseña en el Instituto Notre Danse y en la Academia Eli Conte.
Desde el inicio de la cuarentena todo quedó suspendido y Paula tuvo que reinventarse, convirtiendo el living de su departamento en Godoy Cruz, en el que vive con su marido y su hija de tres años, en un salón de danza. La profe instaló la barra en el comedor y a través de Zoom, sigue enseñando, como se puede.
"En total estoy dando seis clases por semana, antes tenía 15 clases programadas. En total tengo un poco más de 40 alumnos. La duración depende de los grupos, hay encuentros de una hora o 40 minutos que es lo que te permite Zoom. Usamos esa aplicación porque es la que mejor funciona en cuanto a la detección de movimientos, dentro de lo que posibilita la distancia, para corregir un cuerpo ajeno. "
"Las clases virtuales han sido nuestro caballito de batalla. Es muy impersonal, necesitamos el contacto con el otro y se vuelve una tarea muy compleja."
"Es un gran trabajo porque tenes que disponer del espacio, acondicionar tu casa, correr los muebles, trasladar a tu familia a una habitación mientras das la clase, como me pasa con algunos horarios que tengo que cumplir, entonces traslado a mi marido y a mi hija a almorzar a una habitación. Hay que adaptarse también al espacio que me ofrece el living, acomodarlo en tu cabeza para limitar tus movimientos, eso también afecta un montón al estado de ánimo", afirma la profe.
"Yo me considero privilegiada porque he podido mantener mis trabajos y agradezco porque no me falta el laburo y la salud. Pero hay colegas que la están pasando mal", cierra Paula.
Aprendiendo música a pesar de la distancia
Sebastián Weertz es músico y a nivel laboral explora un amplio espectro de facetas que ofrece la profesión. Toca en diferentes proyectos musicales, es sesionista, hace producciones musicales y también da clases de guitarra a un nutrido número de alumnos, de diferentes edades y niveles de formación.
Ahora, con este panorama, Sebastián también tuvo que apelar a la creatividad para continuar con su labor. Aunque destaca que es difícil mantener el 100% de la actividad que antes tenía y que muchos de los proyectos con los que trabajaba se vieron interrumpidos.
"A mí me ha golpeado de las dos maneras. Me ha traído muchos aspectos positivos y también me ha generado varios aspectos negativos. Respecto de lo laboral he perdido casi el 70% de mis ingresos en cuanto a sesiones, a shows en vivo y con respecto a otros tipo de trabajos que no tienen que ver con las clases".
Sobre el mantenimiento de la actividad en cuarentena, explica: "En cuanto a las clases, he perdido más o menos el 30% de mis alumnos, principalmente los de nivel inicial que están empezando y necesitan otro tipo de seguimientos y hacerlo online cuesta mucho más. Muchos prefirieron esperar a que todo pase para retomar. Pero puedo agradecer que yo doy clases de guitarra, muchos que enseñan otros instrumentos tienen el panorama más complicado."
Sin embargo, a pesar de la dificultad de la situación, el guitarrista cuenta que esta circunstancia le hizo explorar una nueva experiencia. "Me redescubrí en una faceta de dar clases a distancia, algo que desconocía porque nunca había tenido tantos alumnos online. Uno tiene que estar al margen para ver que material envía, en que formato, para que sea atractivo. También los videos, para que sea algo que te de ganas de sentarte a estudiarlo. Ha sido difícil pero también ha sido una oportunidad de aprender otros métodos para poder enseñar ".
En casa ¡hay que seguir bailando!
Marcelo y Federico Fernández son músicos. El primero es cantante, compositor y toca en una banda de covers. El segundo es DJ, muy popular en las fiestas de 15. La cuarentena puso en stand by a todo tipo de evento y fiesta, por lo tanto los hermanos tuvieron que ponerse a pensar en una nueva forma de obtener el sustento a partir de su actividad.
La respuesta fue muy ingeniosa: ofrecen fiestas on line. La propuesta se divide en dos partes. Marcelo inicia el festejo, anima a los invitados, cada uno conectado desde Zoom y sus casas, canta un repertorio de canciones y luego, en una segunda conexión, aparece Federico con las bandejas para dar rienda suelta al baile.
En cuanto al funcionamiento de esta propuesta, Marcelo cuenta: "La respuesta es muy buena, están consultando todo, cuanto tiempo dura, que precio tiene, como funciona, etc. La gente está ajustada pero al menos consultan. En dos semanas ya hemos hecho dos eventos, mañana hacemos el tercero y la semana que viene tenemos dos más."
Respecto al detalle del show, explica: "Es la unión de música en vivo y la música envasada de DJ. El problema era que cualquier cosa que venga por streaming si es extenso no está bueno, entonces hacemos dos cosas distintas, en vivo y envasada. Mi hermano es un gran DJ, muy conocido en el ambiente de los cumple de 15. Yo soy músico, tengo mi propuesta propia, soy el cantante de Industria Nacional. Entonces la prueba fue fusionarnos".
Las experiencias han sido muy diversas y hasta el momento han animado un cumple de una mujer de más de 40 y el de un adolescente de 13 años. "Cada uno está conectado en su casa, cada perfil ha sido distinto. Una gran experiencia fue la de una chica de 43 años que cumplió años estando varada en Estados Unidos. Hicimos la fiesta a través de Zoom, eran más de 20 personas entre familias y amigos".