Celeste Rago, hermana de Camila, aseguró que nadie avisó que el asesino había salido de prisión. "No tuvo cómo defenderse", dijo.
Terrible carta de la hermana de Camila Tarocco, víctima de femicidio
En la madrugada de ayer, Camila Tarocco, la joven que era buscada hace más de diez días en Moreno, provincia de Benos Aires, fue hallada semienterrada en un descampado. La mujer tenía 26 años y era madre de dos hijos. Su ex pareja la mató y le confesó el crimen a su familia.
Horas más tarde de conocerse el asesinato, Celeste Rago, hermana de Camila, publicó una carta contando cómo era la relación de la víctima con el femicida, Ariel González, de 33 años, quien estaba con prisión domiciliaria. "Se iba a mudar el sábado para estar tranquila y el viernes desapareció; él se dio cuenta que ella no iba a volver y por eso la mató", aseguró la joven. Y agregó que "Camila no tuvo cómo defenderse" del agresor.
El ex novio de Camila está detenido desde la semana pasada. Aunque confesó el crimen a sus familiares, mintió y aseguró que había pasado la noche con Camila y que, a la mañana siguiente, la acompañó a la parada del colectivo. Pero su relato tuvo varias inconsistencias y los investigadores no le creyeron.
La carta completa de Celeste Rago:
"Ariel González nunca la dejó en paz desde que empezaron a salir hace 7 años, excepto durante los seis meses que estuvo preso por haber violado la perimetral que tenía por las distintas situaciones de violencia contra mi hermana. Hace tres meses estaba con prisión domiciliaria, andando en moto sin tobillera electrónica "porque no había", y encima a Cami no le dieron un botón antipánico, ni siquiera le avisaron. Se iba a mudar el sábado para estar tranquila y el viernes desapareció; el chabón se dio cuenta que ella no iba a volver y por eso la mató. Tiene que cambiar la ley para quienes tienen una perimetral o denuncias: antes de soltarlos, mínimamente deben advertirles a las víctimas que su agresor está suelto. Camila no tuvo cómo defenderse.
Durante 11 días hicimos los rastrillajes con la policía, buscábamos dónde había cámaras, parecía que se la había tragado la tierra. Yo bajé como cinco kilos, estuve mareada toda la semana; no comía, lloraba toda la noche, no podía dormir. Para mí fue una tortura. Y ahora todo lo que sigue desde que nos enteramos: es horrible, no se termina más. Es muy importante que nos den a su hija y a su hijo, de 7 y 5 años; ahora están con la familia de él, que sabía lo que Ariel había hecho con Camila. Cuando ella desapareció, se llevaron a los chicos.
Con Cami éramos como almas gemelas: somos de madres distintas y nacimos con diez días de diferencia. Ella vivió conmigo desde los 15 años; éramos muy unidas, cuidábamos a nuestros hijos, los acompañábamos al jardín... Es todo muy fuerte. Era una piba alegre, siempre muy arriba. Quería estudiar y soñaba con ser feliz y que alguien la quisiera de verdad, pero le arrebataron todos los sueños".
Números alarmantes en cuarentena
Un informe del Observatorio Femicidios de la Multisectorial de la Mujer de Mar del Plata arrojó que desde 20 de marzo, día en el que se decretó la cuarentena, hasta el 14 de abril se registró un total de 18 crímenes de mujeres, de los cuales 12 corresponden a femicidios y otros tres están relacionados con violencia de género. "Desde el aislamiento obligatorio se registró un femicidio cada 14 horas", indicaron.