Ante las críticas por los números exitosos difundidos por el Presidente en su conferencia del viernes, el exministro señaló a quién y dónde deben aumentarse los test.
Para Rubinstein la medidas son correctas, "pero se está testeando poco"
En los últimos días, en el marco del avance del coronavirus, el gobierno anunció una nueva prórroga del aislamiento, aun cuando la Argentina aparece con menos infectados dentro de la región, y resaltó el lugar privilegiado que ostenta el país en comparación con sus vecinos.
Sin embargo, un estudio del instituto IDESA sostiene que la Argentina está entre los países que menos test hace en la región por coronavirus, y que la cantidad de casos detectados depende de la cantidad de test.
"La falta de información por escasez de test deriva en evaluaciones erróneas: Por caso, se distorsionan las proyecciones de muertes. La experiencia internacional muestra que a mayor cantidad de test, menor tiende a ser el porcentaje de muertes reportadas respecto a la cantidad de contagiados. Argentina tiene una proporción de 4,3% de muertes sobre casos reportados, mientras que Perú tiene 2,6%, Uruguay 1,5% y Chile 1,0%. Queda claro que proyectar las muertes con pocos test, más que proyecciones son adivinaciones", de acuerdo a la misma firma", dice el estudio.
Adolfo Rubinstein, exministro de Salud de la Nación, médico y magister en Epidemiología Clínica de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, adhirió a lo expuesto por el informe y trazó un plan para que la sociedad pueda ir manejándose con la cuarentena según el umbral de ocupación de las camas de terapia intensiva.
"Las medidas fueron correctas, pero estamos testando poco y no estamos conociendo el número de casos reales, sino uno de cada cinco, que es muy poco", consideró Rubinstein este lunes en diálogo con el programa Te digo lo que pienso que conduce Ricardo Montacuto por Radio Nihuil.
"Si bien claramente se ha aplanado la curva con las medidas tomadas, que han sido exitosas, el problema es que no hemos erradicado el virus, entonces si salimos del aislamiento, podemos contagiarnos igual, por lo que la única manera de salir, es testear muchísimo más. Estamos testeando mucho menos que Chile, por eso ellos tienen más casos que nosotros", añadió el exfuncionario.
Con respecto de a dónde y a quiénes ampliar una eventual mayor capacidad de testeos, Rubinstein consideró: "Por un lado hay cada vez más certeza de que la mayoría de los casos de coronavirus son asintomáticos o con síntomas leves, entonces eso habla de que no es fácil saber a quién testear".
"No hay indicación de hacer testeos a toda la población porque es inviable, más en un país con tantos habitantes y pocos recursos. Pero sí a los contactos de los sintomáticos, ambientes de alta contagiosidad, villas y asentamientos donde hay falta de agua corriente, geriátricos, cárceles, personal de salud. En todos esos lugares hay que testar a todo el mundo, y varias veces", dijo el galeno.
Y añadió: "Si hacemos eso, tenemos chances de que cuando salgamos del aislamiento, aunque con medidas que están para quedarse mucho tiempo más, ir abriendo y cerrando medidas, relajándolas y haciéndolas más estrictas según cómo esté el abastecimiento de camas de terapia intensiva, pero todo esto debe hacer haciendo muchos más testeos".
Rubinstein también aseguró que "dado que estamos testeando poco, existe la probabilidad de que hayan muchas muertes atribuibles del coronavirus que se nos están escapando porque no han sido testeadas".
El exminsitro propuso un esquema de manejo de la cuarentena en plena pandemia y explicó: "Propongo un esquema donde se tengan indicadores, como la ocupación de terapia intensiva y fallecidos con un umbral que cuando se supere, se apliquen medidas más estrictas y cuando estén por debajo y se aplana la curva, las medidas se relajen, y así de manera intermitente hasta que aparezca la vacuna o bien la mayoría de la población esté inmunizada. El que se enfermó, se entiende que por largo plazo no va a volver a enfermarse".
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