El primer ministro de Reino Unido afirmó que debe "su vida a la salud pública" por ayudarlo a superar su cuadro de coronavirus.
Coronavirus: Boris Johnson fue dado de alta
El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, hospitalizado durante una semana enfermo de coronavirus, fue dado de alta este domingo y continuará el tratamiento en su domicilio, informó el gobierno británico.
Un vocero dijo que "fue dado de alta del hospital para continuar su recuperación, en Chequers", la casa de campo del primer ministro.
"Siguiendo el consejo de su equipo médico, Boris Johnson no regresará de inmediato al trabajo. Él desea agradecer a todos en el hospital St. Thomas por la brillante atención que recibió", agregó.
Minutos antes, el primer ministro de Reino Unido había agradeció al servicio público de salud, el NHS por su siglas en inglés, por haberle salvado "la vida".
"Nunca agradeceré lo suficiente" al personal del NHS, "les debo la vida", dijo Johnson, en su primera declaración oficial desde el lunes pasado, cuando fue internado en terapia intensiva en el hospital St Thomas de Londres debido a complicaciones de su cuadro de COVID-19.
Según la prensa británica, Boris Johnson, dirigente conservador de 55 años que el jueves salió de la sala de cuidados intensivos, se distrae haciendo sudokus y mirando películas, como la comedia romántica Love Actually.
Su novia de 32 años, Carrie Symonds, que está embarazada, le envió copia de sus últimas ecografías.
"El primer ministro sigue mejorando", declaró el sábado el ministro británico de Interior, Priti Patel, en una conferencia de prensa.
Boris Johnson contrajo coronavirus a fines de marzo y durante diez días permaneció en aislamiento en su vivienda hasta que la persistencia de fiebre y tos lo llevaron a hospitalizarse el domingo pasado.
Entonces, se convirtió en el mayor líder mundial afectado por la enfermedad que ha provocado ya 9.875 muertos en Reino Unido y casi 75.000 infectados.
A nivel mundial son 1.712.614 los contagiados y 103.796 los fallecidos, según el recuento de la Universidad Johns Hopkins.
El agradecimiento público ocurre en un momento en que aumenta el descontento en el personal de sanidad, que denuncia la falta de elementos de protección para enfrentar la pandemia de coronavirus.
La Asociación Real de Enfermeros (RCN), el mayor sindicato de ese sector, aconsejó a sus agremiados negarse a trabajar "como último recurso" en el caso de una carencia grave de equipamientos de protección.
"Para el personal sanitario, eso es contrario a su instinto. Pero la seguridad no debe ser objeto de ningún compromiso", explicó a la agencia de noticias británica PA un vocero del sindicato.