Dos senadores estadounidenses piden la destitución del director Ghebreyesus. Otros científicos aseguran que los datos son "un fiasco de evidencia"
Acusan a la OMS de no brindar datos sobre el coronavirus
Dos senadores de EE. UU., Martha McSally y Rick Scott, acusan a la Organización Mundial de la Salud (OMS) por encubrir la manipulación de las cifras de víctimas del COVID-19 provistas por el Partido Comunista Chino (PCCh) y piden la renuncia de su titular.
Hasta ahora hay más de 1 millón de personas contagiadas del coronavirus y más de 82 mil muertos (de los cuales el régimen comunista chino alega que poco más de 3000 murieron en China).
Desde diciembre del 2019 médicos chinos han denunciado la propagación del coronavirus. Pero, en lugar de evitar una pandemia, China se dedicó a perseguir a los médicos, al punto que una de las descubridoras permanece desaparecida.
Según publicó Panam Post, los senadores norteamericanos piden la renuncia inmediata del director general de la OMS, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus , "cuyo prontuario incluye la acusación de encubrir brotes de cólera en su país natal, Etiopía, donde fue ministro de salud del régimen socialista".
"La OMS necesita dejar de encubrirlos (al gobierno Chino). Pienso que el Dr. Tedros necesita retirarse. Necesitamos tomar alguna acción para tratar este asunto. Es simplemente irresponsable, es inconcebible lo que han hecho aquí mientras tenemos gente que se muere por todo el planeta", aseguró la legisladora McSally.
"Sabemos que la China comunista está mintiendo sobre cuántos casos y muertes tienen, lo que ellos sabían y cuándo lo supieron -y la OMS nunca se molestó en investigar más. Su inacción costó vidas", exclamó el senador Rick Scott.
Lo planteado por los legisladores puede ser constatado al ver las redes sociales de la OMS. Dicha organización hizo eco de la versión oficial del régimen.
En enero del 2020, un mes después de la captura de ocho médicos que demostraron el esparcimiento del virus en Wuhan, la OMS anunció que las autoridades chinas no encontraron evidencia clara de la transmisión de humano a humano del coronavirus.
La OMS tardó meses en declarar el brote de COVID-19 como una pandemia, pese a que había cumplido los criterios de transmisión entre personas, altas tasas de mortalidad y propagación mundial.
Recién en marzo del 2020 la OMS lo reconoció. Por tanto, los 180 países en el mundo perdieron meses enteros para realizar campañas de prevención que pudieron salvar miles de vidas.
Incluso cuando el presidente de EE. UU. Donald Trump tomó medidas el 31 de enero, Tedros dijo que no se necesitaban prohibiciones de viaje y restricciones generalizadas para detener el brote y que podrían "tener el efecto de aumentar el miedo y estigma, con pocos beneficios para la salud pública".
Aconsejó a otros países que no siguieran el ejemplo de Estados Unidos. Según Tedros, interferir con el transporte y el comercio podría perjudicar los esfuerzos para enfrentar la crisis. Es más, ni siquiera se refería a la pandemia por su nombre, la descartaba como una neumonía.
El Panam Post, destacó que entre los médicos perseguidos fue el oftalmólogo Li Wenliang, un de las ocho personas detenidas por difundir rumores sobre el brote de la enfermedad mortal.
Ver también: "Desapareció la primera médica que alertó sobre el coronavirus en China"
El blog del doctor Li tenía 1,5 mil millones de lectores que seguían la actualización que hacía sobre el coronavirus. Pero fue censurado en diciembre y él falleció contagiado de Covid-19 en febrero.
Pero el campo académico también cuestiona las cifras de la OMS. Our World in Data (Nuestro Mundo en Datos), una publicación de la Universidad de Oxford, documentó errores e inconsistencias, que incluyen discrepancias de casi una docena de informes de situación presentados por la OMS entre el 5 de febrero y el 16 de marzo.
"El principal problema que vemos con los datos de la OMS es que estos errores no son comunicados por la propia OMS", afirmó el fundador de Our World in Data Max Rosen junto a sus colegas.
"Un fiasco de evidencia" denominó un epidemiólogo y profesor de medicina de la Universidad de Stanford a las cifras de la OMS.