Larry Fink, chairman del fondo de inversión Black Rock, pide un enfoque cuidadoso de cada gobierno y reclama una acción global.
Las claves del gurú mundial de las finanzas para enfrentar la crisis económica
Larry Fink, chairman del fondo de inversión Black Rock, asegura que en sus 44 años en el mundo de las finanzas nunca vio "algo como esto". La frase proviene a la crisis económica que surgirá producto de la pandemia de coronavirus. "Esto ha sido dramático, pero creo que la economía se recuperará finalmente", afirma con algo de esperanza.
Su firma es relevante para la Argentina, es una de las grandes corporaciones con intereses sobre la deuda local, y sobre la situación actual el ejecutivo asegura que a corto plazo observa un panorama oscuro. Sin embargo, considera que la reacción de los gobiernos será fundamental para poder sobrellevar la situación.
Sobre los impactos que está generando el Covid-19 en la economía mundial, Fink asegura que los activos financieros cayeron a "niveles ´record" en las últimas semanas. La dinámica, advierte, se vio exacerbada por una baja liquidez en instrumentos del tesoro estadounidense. Para contrarrestar esta situación, el economista destacó la rápida reacción de la Reserva Federal, bancos centrales de todo el mundo y los gobiernos. "Esta situación carece de los obstáculos para la recuperación de una típica crisis financiera", afirmó en referencia a las medidas de acceso al crédito y estímulo fiscal que tomaron las autoridades de muchos países para poder paliar la crisis.
El economista destaca la acción rápida en esta crisis económica.
"La velocidad y el tamaño de esas políticas están profundamente influenciadas por aquella experiencia. También creo que estas acciones serán más efectivas y tendrán un efecto más veloz, dado que no están enfrentando los desafíos estructurales que tuvimos hace una década", añadió.
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De igual modo, Fink sostiene que a pesar de esto no está "sugiriendo que el mercado ha tocado un piso" y que por ahora eso "es imposible de saber". Sobre este aspecto advierte el alto nivel de endeudamiento en el sector privado.
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Por otra parte, el inversionista destaca que las políticas de estímulo deben tener en cuenta las desigualdades que existen entre los países, y dentro de cada grupo social, a fin de evitar que "el daño económico derivado de esta crisis no caiga desproporcionadamente sobre los hombros de los individuos más vulnerables".
Fink confía en cada Gobierno debe tener en cuenta su situación actual.
En ese sentido, Fink le sugiere a los gobiernos que sean cautos en sus programas y reclama un enfoque global. "Para derrotar esta crisis, necesitamos respuestas que crucen líneas partidarias y fronteras nacionales", cerró el titular del fondo que administra más de US$6 billones y tiene 16.200 empleados en todo el mundo.
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