La Justicia Federal de Mendoza otorgó prisión domiciliaria a ocho acusados y condenados por delitos de lesa humanidad.
Rechazo a la detención domiciliaria de ocho represores de Mendoza
En el marco de la pandemia de coronavirus, la Justicia Federal de Mendoza le otorgó la prisión domiciliaria a 8 represores condenados por delitos de lesa humanidad.
Se trata de Oscar Bianchi, Pedro Linares, Segundo Héctor Carabajal, Omar Navarro Moyano, Carlos Ledesma, Oscar Simone, Juan Carlos Ponce y Mario Ocampo.
Abogados de Abuelas de Plaza de Mayo y el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos argumentaron que pese a ser querellantes no fueron consultados y que la medida debió tomarse tras realizar "informes médicos exhaustivos" y acreditar "que efectivamente existe un riesgo cierto y determinado a la salud derivado de la pandemia".
Los abogados Viviana Beigel y Pablo Salinas, en representación de los organismos de derechos humanos, manifestaron en un escrito al TOF-1 su oposición a la medida, reclamaron la asignación de "custodia policial para evitar cualquier tipo de violación a las pautas impuestas para esta modalidad de cumplimiento de la pena" y pidieron que el encierro hogareño se limite al "plazo en el que persista la emergencia sanitaria".
El argumento que usó el Tribunal Oral Federal Número 1 fue la emergencia sanitaria en función de la pandemia.
La decisión del TOF1 establece el "arresto domiciliario cautelar excepcional y provisorio y ordena la supervisión del régimen de prisión domiciliaria a la Dirección de Promoción del Liberado, que podrá llevar adelante su trabajo de manera telefónica o por los medios que estime pertinentes en el marco de la emergencia sanitaria".
En el mismo escrito, el tribunal solicitó al programa de Asistencia a Personas Bajo Vigilancia Electrónica de la Dirección Nacional de Readaptación Social del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación que "arbitre las medidas necesarias y conducentes para colocar un dispositivo de monitoreo al interno, ordenar la prohibición de salida del país, librándose los oficios de rigor".
En la lista de los que hicieron el mismo pedido de prisión domiciliaria y aún esperan respuesta figuran Juan Carlos Santamaría (Condenado a prisión perpetua), y Jorge López, quien está siendo juzgado. Ambos formaron parte de la Fuerza Aérea.
También pidieron irse a sus casas Julio Héctor Lapaz, Guillermo Campanille -también recaptura tras permanecer prófugo durante años- y Antonio Garro.