Afirman que Luca Singerman se escapó de un hospital en Uruguay y engañó al personal a bordo para subirse al barco. Sin embargo, el joven lo niega.
El pasajero acusado de aislar a 400 personas en Uruguay negó todo
Un joven de 22 años fue imputado por la Justicia Federal este viernes luego de haber subido a un barco de la empresa Buquebus con el objetivo de cruzar el Río de La Plata desde Uruguay hacia Argentina. El sujeto detenido fue identificado como Lucas Singerman, tal como lo confirmó el periodista Mariano Martin.
El detenido en cuestión es un ex jugador de rugby del Club Ciudad de Buenos Aires, estudió en ORT y es hijo del reconocido economista Pablo Singerman, director del Departamento de Ciencias Sociales del CBC, UBA, además de ser ser docente en la materia.
Según la denuncia, Lucas Singerman escapó de un hospital en la ciudad de Colonia, donde llegó con posibles síntomas de coronavirus. Estando con fiebre, se tomó un medicamento para que su temperatura no fuera descubierta por los oficiales a bordo en el abordaje al barco. Una vez que llegó a Buenos Aires, confesó su situación y en consecuencia los 400 pasajeros que viajaron junto a él quedaron aislados por precaución.
400 personas que viajaban en Buquebus fueron aisladas.
Sin embargo, en diálogo con el periodista Sergio Danishewsky, el joven dijo que fue víctima de un "linchamiento mediático" y negó la acusación. "Nunca tuve los síntomas como se dijo. Nunca estuve en ningún hospital ni me escapé de ningún lado."
El padre también habló con los medios: "Habían vuelto desde un intercambio de Madrid hacia Uruguay, y se quedaron allí en la casa de uno de los chicos hasta que se enteraron de que empezaba la cuarentena obligatoria, y volvieron", aseguró el hombre en comunicación con Radio La Red. Además explicó que es falso que su hijo supiera que el test le había dado positivo. "Se enteró una vez en el barco y se autodenunció para proteger a todos los que estaban con él. Ni bien supo le avisó al capitán, y repito, no estuvo internado ni se escapó de ningún lado", finalizó el padre del joven.
El detenido se arriesga a una pena de prisión efectiva que va de tres a quince años por negligencia e imprudencia al no respetar reglamentos y deberes que corresponden a un aislamiento frente a una pandemia, poniendo en riesgo de contagio a quienes compartieron espacios con él. El posible infectado permanece detenido en cuarentena en el Hotel Panamericano.
Ver: Un ingeniero que vino de Brasil pudo haber traído el coronavirus a Mendoza
Lucas Singerman.
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