Vienen de todas partes, y la mayoría ya estará hoy en Mendoza. El sábado van a Uspallata y el domingo trepan el Cristo Redentor.
Cientos de motoviajeros empiezan a llegar para el encuentro más alto del mundo
Algunos han dormido apenas unas horas, repartiendo el tiempo entre trabajo, hijos, obligaciones, estudio, y preparar la moto, que no es poco. La ansiedad es apenas soportable. Pero todo pasa cuando se sale a la ruta.
Cientos de motoviajeros de todas las regiones del país, de Colombia, Brasil, Perú y Chile, hasta ahora, comienzan a concentrarse en el Gran Mendoza para el VI Encuentro Internacional de Motociclistas Cristo Redentor, un evento cada vez más intenso y multitudinario. Se cree que habrá más de dos mil motociclistas de todas las edades y géneros compartiendo la ruta, las actividades y la subida al Cristo en el Paso de la Cumbre entre sábado y domingo, en este encuentro entre "Ciudadanos Comunes" que la agrupación Falconeros Mendocinos empezó con "nada" años atrás. Ahora, es el encuentro más importante del año, declarado de interés turístico de la provincia, y es además el más alto del mundo. Dos mil abrazos, sonrisas y lágrimas a 3.854 metros de altura, como escribimos una vez. Mirando al cielo a la cara.
La mayoría de los motociclistas salió desde las provincias más lejanas hoy, otros lo hacen en la madrugada de este viernes, y otros vienen "empalmando" viajes más largos. En el grupo de WhatsApp coordinado por Daniel "Duende" Díaz, el principal organizador del encuentro junto a su esposa Anita y la comisión que les acompaña, se disfrutan minuto a minuto cada uno de los preparativos, incluso con los problemas de último momento: el que se cayó, el que rompió un espejo, el que tuvo problemas con el arranque... Incluso al autor que participará del encuentro, le rescató ayer la gente de Hugo Robles, de Servimoto, luego de cortar un cable de la batería y quedarse "muerto" en la calle.
El mundo de los motoviajeros es apasionante. Hay de todas las edades. Hombres y mujeres. Noelia Chaile vive en Salta, es administrativa, y trabaja con empresas contratistas para obras hidroeléctricas. Perdió la cuenta de los moto encuentros en los que ha participado y devora rutas arriba de una Yamaha XTZ 250. "A los 9 años se me puso en la cabeza que tenía que andar en moto". A los 15 pidió una moto en vez de fiesta y no le dieron el gusto, para que no se mate. A los 22 se la compró con su esfuerzo y su trabajo. Cuidó chicos, fue niñera, hizo mandados, trabajó en un hotel, fue gastronómica... De todo. Ahora cumple su sueño de motociclista en cuanto encuentro hay. Lleva 12 años en moto, e incluso fue endurista.
El encuentro es multimarca. Cualquiera en la moto que pueda, que tenga, que se le ocurra, puede participar. Este fin de semana veremos desde grandes trails, hasta motos de 125 CC o incluso menos. Un motoviajero chileno que falleció meses atrás, venía en una Honda Dax.
Los motociclistas concentrarán en el Parque General San Martín el sábado desde las 8:00 de la mañana, y la caravana partirá hacia Uspallata por el Corredor del Oeste, la ruta 82, el nuevo túnel, el perilago de Potrerillos y finalmente la Ruta 7 hasta llegar al primer destino. Compartirán actividades en el cámping, a la noche hay una cena tradicional, bandas, música... food trucks... Y el domingo a la mañana, será la gran concentración que con la custodia de la Policía Provincial y Gendarmería irá hasta Las Cuevas, para luego subir al Cristo, encontrarse con los hermanos chilenos, y luego emprender la bajada y el regreso.
El tiempo estará bueno para la travesía, aunque varios de los viajeros atravesaron serias tormentas y viento para llegar hasta aquí. Será, otra vez, un encuentro memorable, por la hermandad entre ciudadanos comunes. No hay nada mejor que eso.