La Unión Argentina de Rugby se comprometió a generar un programa específico de concientización.
La UAR emitió un comunicado por los rugbiers asesinos de Villa Gesell
Personas vinculadas al rugby volvieron a matar, ahora en Villa Gesell y a la salida de un boliche. Once rugbiers del Club Náutico Arsenal de Zárate quedaron involucrados en el asesinato a golpes a un joven de 19 años y otra vez el deporte ovalado quedó manchado con sangre.
Debido a un nuevo episodio reiterado y creciente de violencia relacionado a hombres que practican este deporte, la Unión Argentina de Rugby decidió recoger el guante y tratar de buscar una solución. El primer paso fue sacar un comunicado al respecto.
Desde sus canales oficiales en las redes sociales y su sitio web, la UAR se expresó: "Tras los hechos públicamente conocidos de violencia física relacionados con jugadores de rugby, estamos profundamente consternados, por lo cual, consideramos necesario pronunciarnos.
Lamentamos profundamente el fallecimiento (acá debió decir "el asesinato") de Fernando Báez Sosa esta madrugada en la localidad de Villa Gesell y queremos expresar nuestra mayor solidaridad para con sus familiares. Es aborrecible que un joven salga a divertirse y termine de esta manera.
Esto no puede volver a suceder en nuestra sociedad y todos juntos debemos condenar expresa y enfáticamente estos sucesos de violencia.
Ante esto, inmediatamente, la Unión Argentina de Rugby ya trabaja en redoblar los esfuerzos y generar un programa específico de concientización que colabore para que estos casos no sucedan nunca más. Lo implementaremos junto a las 25 uniones provinciales para que se traslade a los clubes, conscientes de que podemos ser parte de la solución a la violencia entre los jóvenes, independientemente de que no sea una exclusiva responsabilidad nuestra.
Nuestro juego convive con el contacto físico desde muy temprana edad, pero siempre dentro de un claro reglamento. Quienes no lo entiendan de esta manera y usan su fuerza física en detrimento de otro no representan nada del rugby ni sus valores. Son la cara más cruel de un flagelo que atañe a toda la sociedad".