Por qué se pelea aún por la 7722 y la nueva ley minera

"La opinión pública es la que se publica". Es decir, una cosa es la realidad toda, y otra cosa es lo que se publica de ella. Y esto aplica aún más en tiempos de redes sociales. Esta situación se hizo notar en estos días de mucho fragor mediático donde el debate legislativo sobre la reforma de la ley 7722 que impulsó el gobernador Rodolfo Suarez ya finalizó, pero la polémica se sostiene en las calles y rutas por parte de los sectores que resisten lo que se votó en la Legislatura el viernes 20.

Esto es un repaso de varias horas después del suceso institucional que dejó con una sonrisa a los sectores de la industria, en especial a la metalmecánica y a la misma industria extractiva minera a cielo abierto. Pero que despertó otra vez la furia movilizada de algunos sectores agrarios y ambientalistas "condimentandos" con expresiones de izquierda y de los dirigentes territoriales que preparan la reacción desde lo judicial, contra la reforma legal.

La otra observación es cómo se ha impuesto en los ámbitos callejeros el número "7722" y su vinculación con la defensa del agua pura y en contrapartida, la mala imagen que conlleva la minería o la megaminería en ciertos sectores de la sociedad.

Hoy será un día de protesta en la Ciudad y vendrá desde el Valle de Uco. Desde un lado y otro sospechan de "infiltrados" para violentar el acto. Desde el mismo gobierno y desde los mineros hablan de activistas de izquierda de otras provincias, y desde las asambleas vigilan en la marcha que no haya personas disfrazadas de ambientalistas violentos para desacreditar el reclamo.

La letra chica de lo que se escuchó

Laureano Manso, el director de Aderpe (industriales del Carril Rodríguez Peña) y del Cluster de minería de la UIM (Unión Industrial de Mendoza) estuvo el viernes en la Legislatura. Fue el que se mostró más moderado en sus gestos y sus expresiones luego del "triunfo" minero en las bancas.

El ejecutivo señaló al Post que "hubiese sido mejor la derogación (de la 7722), y tener una ley específica de control ambiental y regalías". De todos modos remarcó que había conformidad en el sector y a la vez que advirtió que "al inversor extranjero, le va a hacer 'ruido', incluso la modificación". Por eso remarcó: "tenemos que mostrarnos claros para afuera, si pretendemos que inviertan en Mendoza, y más con el contexto argentino".

¿Se podrá controlar?

Manso responde con énfasis cuando le preguntan si el esquema de control fijado en la ley reformada se podrá aplicar. "¡Si, si se cumple con la ley! ¡Depende de todos que la hagamos cumplir! Las empresas grandes se adaptan, de acuerdo al país en el que estén. Todo aquel que descrea o pretenda trabajar en esta actividad, puede y debe capacitarse, para formar parte del control", dice el empresario.

La diputada del PD, Mercedes Llano es una de las descreídas y ha estudiado el caso. Fue la única legisladora oficialista que se abstuvo de votar por estar convencida que no será posible armar el cuerpo de inspectores ambientales. Llano es una investigadora y experta en recursos humanos en las estructura estatales y su argumento se funda en su conocimiento para justificar su postura.

"Este proyecto no garantiza un sistema de control sólido y autónomo ¿Cómo se garantiza esto? A través de instituciones profesionalizadas. No capturadas por el poder político, económico o sindical. Hoy las capacidades de control de la Provincia son muy endebles. El cuerpo de inspectores que se encuentran en la Dirección de Protección Ambiental y la Dirección de Minería es muy acotado y no han sido seleccionados por concurso. Conformar una policía ambiental llevará un plazo muy extenso. No es de la noche a la mañana que se conforma. El sistema de selección que se ha aplicado por la Provincia tiene un nivel de tecnificación bajo y lo hace débil. Me preocupa cuál será el perfil de inspectores con que se termine constituyendo la Policía Ambiental", dictaminó la mujer del PD en el Salón de los Pasos Perdidos al final de la sesión.

Su abstención le valió una crítica de un dirigente ganso territorial como José Pipo Álvarez conocido directivo cooperativo eléctrico con proyección nacional. El también viticultor de San Martín criticó la postura intermedia del voto y además fijó una posición en defensa de la antigua 7722.

Datos mineros para ambientalistas

Manso respondió puntualmente preguntas para conocer la mirada empresarial sobre la nueva 7722 en su versión "fiscalizadora" y no "prohibitiva" como lo era hasta el jueves 19.

-¿Se puede reemplazar el cianuro o el ácido sulfúrico (sustancias que estaban prohibidas por la antigua 7722) para extraer los minerales por sustancias no agresivas para la salud humana?

-Depende de cómo se usen las sustancias químicas pueden ser agresivas y también se pueden utilizar a favor. La ciencia y tecnología avanzan permanentemente, ya hay pruebas en Australia de lixiviados con ácido cítrico.

-¿Cuáles son las zonas de Mendoza donde se podrá extraer minerales metalíferos?

-Las limitantes más grandes son los parques provinciales...

-¿Cuántos proyectos esperan presentarse de aquí en más?

-Es un proceso a largo plazo, viene una etapa de conocer que tenemos en la cordillera, después ver cómo se pueden hacer los proyectos y por último, que sean factibles desde lo económico. Recién ahí empieza, desde el quinto año en adelante. Los proyectos factibilizados son pocos.

-Pregunto puntualmente por San Jorge porque el gobernador lo puso como ejemplo ¿Se avanzará con este proyecto en Las Heras?

-Es uno de los pocos que está factible. Si aprueban la Declaración de Impacto Ambiental, podría comenzar a trabajar. El gobierno sabe, al igual que nosotros, los proyectos que más rápido pueden generar empleo, por eso lo ponen de ejemplo.

-Si tuvieras oportunidad de que un ambientalista te escuche ¿Qué le dirías a favor la actividad?

-Que sin olvidar nuestras raíces y de donde venimos, tenemos que seguir adelante, como lo hubiesen hecho nuestros abuelos. No imagino a esa generación que fue siempre para adelante y que hizo grande a Mendoza, sentir que no pueden hacer algo y que no lo pueden hacer bien.

-¿Qué significa para vos el número 7722?

-Nada, es el número de una ley...

Marcha Difonso y Carmona en reversa

A las 17,20 del viernes, el diputado oficialista de raíz gansa pero con partido propio, Jorge Difonso se enfrentó a las cámara tenso después de votar en contra de la nueva ley que ahora habilita la instalación minera a gran escala.

"La nueva ley no respeta los principios de progresividad y de no regresividad. Estaba expresamente prohibido el uso del cianuro y el ácido sulfúrico lo cual se ha obviado y se ha puesto en riesgo el agua en Mendoza. Por esto decimos que es claramente inconstitucional y de verdad lamento lo que ha pasado en la Legislatura de Mendoza", dijo el ex intendente de San Carlos y uno de los autores de la antigua 7722 en 2007 cuando era senador provincial.

Hace unas horas, por la tarde del domingo, se siguió el pulso a través de las redes, del paso de la caravana que llegará a primera hora a Casa de Gobierno para expresar el rechazo a lo sancionado por los legisladores. Y en ese devenir de la protesta desde el Valle de Uco, irrumpió Guillermo Carmona que se expresó como "militante peronista y kirchnerista" con la evidente intención de diferenciarse de la posición del PJ en las bancas en su mayoría. Carmona -que es presiddente del PJ- mandó un comunicado por WhatsApp y por Twitter. Directamente le pidió al gobernador que no promulgue la ley aprobada.

La mirada de Suarez en las bancas

Justamente para cerrar este reporte una frase de una intérprete del pensamiento y del ánimo de Rodolfo Suarez. Ella es la senadora Natacha Einsechlas ex funcionaria en la Capital. "Estoy contenta porque (reformar la ley 7722) es un salto cualitativo y es un desafío para todos y una oportunidad que nos tenemos que dar", dijo la optimista parlamentaria oficialista cuando llegó a las 8 de la mañana del viernes al Senado, después de sortear el laberinto de vallas dispuestas para evitar bloqueos protestantes como los que ocurrieron el martes pasado.

Lo que dice "Doña Julia"

Hay más de una Mendoza, por lo menos son dos las que evidencian. Ambas comparten el mismo territorio y son habitadas por personas con raíces diversas pero todas saben que el agua es escasa cada vez más de acuerdo a los informes científicos y que el trabajo también es exiguo. Son el cambio climático y la crisis socioeconómica, tan recurrentes ambos fenómenos. Una Mendoza reclama por el cuidado del agua esencial para la vida humana y la otra pugna por ampliar la matriz productiva para proyectar esta sociedad en el tiempo.

Es necesario compatibilizar las motivaciones, legítimas ambas. La ley está sancionada y se pondrá en vigencia como quiere Suarez y será resistida judicialmente como ya lo dijo Difonso. La protesta en las calles se hará sentir, con su bronca antiminera. 

Y Doña Julia que nació en Mendoza, una habitantes de las tantas que hay en cualquier barrio de Mendoza donde hay cortes de servicios dirá: "¡hay un lío en el centro...! creo que es por lo del agua...". 

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