Una obra que, según indican, molestó mucho a Alberto Fernández.
Lío en la Casa Rosada por una remodelación que hizo Macri
Una remodelación que inició Mauricio Macri en la Casa Rosada, y que continúa durante el gobierno de Alberto Fernández, molestó sobremanera al presidente, más que nada porque aún falta pagar $45 millones por una parte del plan de obra.
Según informó Ámbito, la obra consta de la demolición de una antigua escalera del siglo XIX dentro de la sede presidencial para dar lugar a un ascensor para ir a la terraza. Además, se eliminó la histórica cúpula de Balcarce 50 para construir un deck para los empleados.
Esta remodelación, que ya debería estar concluida, contempló tres etapas con un presupuesto total por $285 millones. La administración Macri, a través del secretario general de la presidencia a cargo en ese momento de Fernando De Andreis, remitió a la Comisión de Monumentos Históricos el plan de obras para la Casa Rosado solicitando su autorización ya que, al tratarse de un monumento histórico, no pueden encararse reformas sin el previo visto bueno de este organismo.
En un escrito de más de 25 páginas, los miembros de la Comisión rechazaron algunas modificaciones y autorizaron otras. Sin embargo, no avalaron la destrucción de esta famosa escalera sino que recomendaron continuar utilizando el ascensor existente.
Por su parte, la Comisión sí avaló el rescate de las oficinas del segundo piso de la Casa Rosada, el aislamiento acústico de las ventanas del despacho presidencial y otras obras de infraestructura.
En tanto, la segunda etapa cuenta con un presupuesto de $118 millones y aún sigue en obra. Abarca la remodelación del subsuelo, la construcción de nuevos núcleos sanitarios y se prevé optimizar el sistema energético del lugar.