En su última intervención en la Cámara de Diputados, la titular de Coalición Cívica se declaró "en contra de los súper".
Para Carrió, "si se tienen que fundir los supermercados, mejor"
En su última intervención en la Cámara de Diputados, a la cual presentó su renuncia a partir del 1 de marzo, la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, se declaró "en contra de los supermercados" en el marco del debate sobre la ley de Góndolas.
La diputada de Cambiemos se ausentó a la sesión durante la discusión de la ley de Alquileres pero bajó al recinto cuando ya se había iniciado el debate sobre el proyecto de Góndolas, ya que había intervenido en todo el proceso previo de comisiones a partir de la redacción de una iniciativa propia sobre el tema.
La llegada de Carrió para ocupar su banca generó un murmullo tal que la miembro informante del proyecto opositor, Marcela Passo (Frente Renovador) debió interrumpir su discurso y recién lo reanudó luego de que Pablo Tonelli, que presidía ese pasaje de la sesión, reclamara silencio a la sala.
"Acá se funden los productores y el consumidor. Y los gobernantes acuerdan con los dueños de los supermercados, cualquiera sea el gobierno. Yo no estoy a favor de los supermercados, estoy en contra", manifestó.
Aclaró que esta posición personal no representaba la del interbloque oficialista, y luego se permitió una broma sobre su pertenencia a Cambiemos.
"Ya a esta altura no se ni donde estoy porque no voy a estar ni en la política", bromeó la diputada, que semanas atrás anunció su alejamiento de la política institucional.
En su opinión, los supermercados son "corporaciones" que "estafan" ya que "fijan los precios y les es fácil arreglar con cualquier Gobierno". Aseguró que "si se tienen que fundir los supermercados y renacer los almacenes, mejor para la historia del país".
En el arranque de la sesión, cuando la diputada oficialista aún no estaba presente en el recinto, se aprobó la renuncia de Carrió a su banca a partir del 1 de marzo, pero varios legisladores opositores protestaron porque de esa manera se estaría convalidando que la dirigente de la Coalición Cívica continuara cobrando su sueldo sin trabajar durante todo el verano. .
La diputada del Movimiento Evita Araceli Ferreyra la tildó de "ñoqui" y consideró que es "una vergüenza" que siga percibiendo los haberes sin presentarse a cumplir con las tareas propias del cargo.