El presidente de Brasil enviará a un ministro.
Bolsonaro "bajó" a su vicepresidente de la asunción de Alberto F.
Luego de anunciar que no asistiría personalmente a la asunción de Alberto Fernández al frente de la Casa Rosada, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, bajó a su vicepresidente, Hamilton Mourao, de la ceremonia del próximo 10 de diciembre y, en cambio, enviará a un ministro.
El cambio se da en medio de la serie de cortocircuitos que vienen marcando el vínculo entre el titular del Palacio del Planalto y el Presidente electo, incluso desde los tiempos previos a las elecciones primarias del 11 de agosto.
Tras lamentar el triunfo del Frente de Todos en los comicios, el líder del Partido Social Liberal había anticipado que no iba a participar de la ceremonia de asunción de Alberto Fernández. Hace escasas horas, se había informado que en su lugar asistiría el vicepresidente, Hamilton Mourao.
Sin embargo, este miércoles, la vocera del Palacio del Planalto, Elane Cajazeira, advirtió que se había producido un cambio y que, finalmente, será un ministro quien representará a Brasil en los actos protocolares.
"El presidente de la República designará un ministro como su representante, después de que el Gobierno brasileño reciba la invitación a la ceremonia de asunción del nuevo Presidente de la Argentina", señaló la portavoz de Bolsonaro en declaraciones a Infobae.
De esta manera, el principal socio comercial de la Argentina estará representado por un integrante del Gabinete de ministros el próximo 10 de diciembre, a diferencia de la tradicional presencia de los mandatarios brasileños en las asunciones de los jefes de Estado argentinos.
En 2015, cuando Mauricio Macri se hizo cargo de la Casa Rosada contó con la presencia de Dilma Rousseff, así como también había estado en 2011 para el inicio del segundo mandato de Cristina Kirchner; por su parte, Luiz Inácio "Lula" Da Silva había viajado a Buenos Aires en 2007 para el acto en que comenzó su gestión la actual vicepresidenta electa.
En tanto, el 25 de mayo de 2003 el líder del Partido de los Trabajadores (PT) había asistido a la asunción de Néstor Kirchner.
La última ocasión en la que había faltado un presidente de Brasil al comienzo de un mandato de un mandatario argentino fue el 2 de enero de 2002, cuando Eduardo Duhalde asumió al frente de la Casa Rosada en medio de los convulsionados días de la crisis económica y social que afectaba al país en esos tiempos: al ser el quinto jefe de Estado en menos de 15 días, la ausencia de representantes extranjeros se daba por descontada y el brasileño Fernando Henrique Cardoso no fue la excepción.