El juez deberá decidir si ordena medidas en la investigación "residual" que está a su cargo o si se los entrega al Tribunal Oral.
El fiscal Stornelli le entregó los cuadernos de Centeno al juez Claudio Bonadio
El juez federal Claudio Bonadio recibió este jueves los seis cuadernos supuestamente escritos por el remisero Oscar Centeno que aparecieron ayer y ahora deberá resolver si ordena medidas en la investigación "residual" aún a su cargo o los entrega al Tribunal Oral.
Los seis cuadernos fueron entregados a media mañana al juez por el fiscal federal Carlos Stornelli, quien ayer los recibió de manos del periodista del diario La Nación, Diego Cabot, informaron fuentes judiciales.
El juez deberá ahora resolver si ordena medidas en el marco de la parte de la investigación "residual" por los cuadernos de la corrupción aún a su cargo o los envía al Tribunal Oral Federal 7, que prepara el juicio por el tramo central del caso, explicaron fuentes judiciales.
Ver: El gobierno jura que "no tiene nada que ver" con aparición de los cuadernos
Se trata de seis de los ocho cuadernos que Centeno ratificó haber escrito con detalles del presunto pago de sobornos por parte de empresarios a ex funcionarios kirchneristas, como el detenido Roberto Baratta.
Entre otras medidas, podría ordenarse un peritaje caligráfico para confirmar la autoría de Centeno y cuándo fueron escritos y también citarse eventualmente al imputado colaborador a una ampliación de su declaración indagatoria. Centeno había dicho que quemó los cuadernos en la parrilla de su casa.
En sus escritos, detalló el circuito de recaudación ilegal que se montó en el caso donde ya fue enviado a juicio al igual que los demás procesados como la ex presidenta Cristina Kirchner, el ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido y Baratta, entre otros.
Centeno tiene ya asignado defensor oficial ante el Tribunal Oral, Maximiliano Balmaceda, quien deberá intervenir si los cuadernos son remitidos a esa instancia.
En la instancia de instrucción del caso, su defensa es ejercida por Gustavo Kollman.