La Cámara Alta se lleva anualmente más dinero que el que se destinará para arreglar 200 escuelas mendocinas
Mantener el Senado mendocino sale 23 mil dólares por día
Mantener la Cámara de Senadores les cuesta a los mendocinos unos 23 mil dólares diarios. Si la dividimos en la cantidad de senadores, cada uno de ellos demanda 600 dólares por día para llevar a cabo su tarea legislativa.
No es que cada senador cobre ese dinero, sino que es el resultado de dividir el presupuesto de gastos corrientes de la Cámara Alta y la Unidad de Gestión Legislativa (la vicegobernación o Presidencia del senado), entre los 38 legisladores.
El total presupuestado para 2019 es de $494 millones. En dólares a $60 serían unos 8,23 millones al año. Si lo dividimos entre los 38 senadores, son unos 216, 6 mil dólares anuales por cada senador, unos 18 mil al mes y USD 600 diarios.
El proyecto del intendente de la Ciudad y candidato a gobernador Rodolfo Suárez de transformar el Poder Legislativo en unicameral, le ahorraría al estado provincial ese dinero.
Si bien la vicegorbernadora Laura Montero hizo una gestión importante en cuanto a la reducción del gasto corriente (sueldos y servicios) dentro del Senado, lo cierto es que ese dinero supera por mucho a los $300 millones que invertirá la provincia en el arreglo de más de 200 escuelas.
¿Senado o 200 escuelas?
Según informa la gacetilla de prensa enviada por Infraestructura Social Básica, dependiente del ministerio de Economía, esa dirección comenzará en octubre con el arreglo más de 200 escuelas que tienen problemas como filtraciones de techos, en las instalaciones eléctricas, de instalaciones cloacales y baños, además de problemas de calefacción.
Esos trabajos demandarán unos $300 millones y beneficiarán a más de 100 mil alumnos de todos los niveles educativos de toda la provincia.
Son 300 millones para el bien de 100 mil chicos, contra 1 millón por día para sostener una cámara legislativa cuya función es "revisar" los proyectos que son tratados en Diputados.
Revisar viene del latín: prefijo re (repetición) y visus (visto). Significa "volver a ver".
En épocas de crisis como las que atraviesa el país, es imprescindible revisar en qué se gasta el dinero de los contribuyentes. Volver a ver cuáles son las necesidades reales y quiénes los verdaderos merecedores del esfuerzo que hace cada mendocino para pagar los impuestos.