Se trata de un terreno ubicado en la zona de Parrales que fue adquirido en condiciones que no están del todo claras. Pedido de informes trunco y el chalet de la discordia.
Piden investigar a la municipalidad de Santa Rosa por la compra de un campo
En estas horas, un grupo de concejales de la oposición de Santa Rosa aguarda que la municipalidad de ese departamento responda un pedido de informes por la compra de un campo de cinco hectáreas en La Dormida (ver foto que ilustra la presente nota).
Se trata de un terreno cuyas condiciones de compra son todo un misterio, al igual que las explicaciones oficiales. Solo se sabe que se abonó cerca de 5 millones de pesos y, supuestamente, se adquirió para construir entre 500 y 600 viviendas.
El problema es que ya hay dos terrenos en los cuales oportunamente se empezaron a construir casas y las obras nunca se culminaron. "Tenés el barrio Cosquín sin terminar. Vive gente pero la mitad está desocupada porque no lo terminaron. Y tenés el barrio Procrear, con 84 casas y menos de 7 ocupadas. Dos años hace que lo terminaron y nadie del pueblo puede acceder", contó la concejal Débora Quiroga ante la consulta del Post.
No es todo: durante la gestión de Sergio Salgado la comuna adquirió otras tres hectáreas y medio justo enfrente del lugar que ahora está en discusión.
Lo confirmó el propio exmandatario a este diario: "Es cierto, de hecho había involucradas dos uniones vecinales; ya estaba listo para hacer casas pero nunca se hicieron".
Según una tercera fuente, que pidió no ser identificada, nunca se pudo construir la segunda etapa de otro barrio por no tener factibilidad de agua.
Como sea, la objeción de los ediles no solo tiene que ver con lo aquí descripto, sino también -y sobre todo- por un tópico en particular: la municipalidad adquirió el terreno con un enorme chalet incluido y, poco después, ese mismo chalet apareció a nombre de un hombre de apellido Canci, de Tunuyán. La finca, dicho sea de paso, fue adquirida a una familia histórica de Santa Rosa, los Cremaschi.
"Compran todo, incluso el chalet pero luego aparece a nombre de Canci, ¿no es raro?", se preguntó retóricamente uno de los concejales consultados para esta nota.
Pero hay un dato aún más suspicaz, revelado por el propio encargado de la finca a sus íntimos: el secretario de gobierno santarrosino, Marcos Nuarte iría los fines de semana a ese lugar con algunos de sus amigos. El funcionario es oriundo de Tunuyán.
Entretanto, mientras crecen las suspicacias, los concejales insisten en conseguir algo de información al respecto, pero no lo logran.
"El expediente de la compra lo han guardado bajo cinco llaves", dijo al Post Diego Maure, concejal de la oposición al respecto.
-¿Qué significa?
-Significa que el expediente no está circulando por las oficinas administrativas del municipio, así que no tenemos ni la letra chica ni la letra grande. Lo tiene la asesoría letrada y no se puede filtrar. No pasa por ninguna de las oficinas donde lo podríamos rastrear: ni en Obra Pública ni Suministro, entre otros.
-¿Puede el municipio no contestar el pedido de informes?
-Sí, pueden no contestar el pedido de informes, pero está claro que infringen la Ley 1079, que Norma Trigo conoce bien porque fue concejal.
Es curioso, porque hace apenas unos meses el Tribunal de Cuentas de Mendoza (TDC), a través del expediente 2036-C-2018, levantó en peso al Ejecutivo comunal por ese mismo motivo.
Lo hizo a través de un dictamen que publicó el Post y que vio la luz luego de que un grupo de concejales santarrosinos le pidiera a ese cuerpo que interviniera por la imposibilidad de tener acceso a puntuales pliegos licitatorios, ya sea respecto de cuestiones de menor o mayor relevancia.
El documento fue firmado por el mismísimo titular de ese cuerpo, Salvador Carlos Farruggia junto al jefe de departamento de Despacho, Gustavo Barbera.
Finalmente, una aclaración: este diario pidió los detalles de la adquisición del terreno pero tampoco obtuvo respuesta oficial.