Mia Khalifa contó qué la llevó a la industria XXX y cómo no todo fue color de rosa.
Las picantes confesiones de una ex actriz porno musulmana
Mia Khalifa saltó a la fama en el mundo de la industria pornográfica luego de que apareciera en un video portando un hiyab islámico (el pañuelo que usan las mujeres musulmanas para cubrirse la cabeza). Esta situación generó tal revuelo que la llevó a recibir amenazas del grupo terrorista Estado Islámico.
En una entrevista con Stephen Sackur, en el programa de la BBC Hard Talk, la exestrella porno reveló muchos detalles de su participación en la industria pornográfica y como "era mi pequeño y sucio secreto, pero me explotó en la cara".
Durante la charla, Khalifa relató cómo ingresó al mundo XXX cuando un hombre se acercó a ella: "No fue `oye, ¿quieres meterte al porno?´. Fue más un `eres hermosa, ¿te gustaría modelar un poco? Sabes, tienes un gran cuerpo y creo que serías genial para modelar´. Cosas así. Y después de que llegué al estudio, era un lugar muy respetable, un lugar magnífico en Miami, en Doral, Florida. Estaba limpio. Todos los que trabajaban allí eran amables. Todos sus cubículos estaban decorados con fotos familiares. Como si no fuera nada dudoso o algo que me hiciera sentir incómoda. La primera vez que entré no fue la primera vez que filmé una película porno. Fue la segunda vez. En la primera fue más de firmar el papeleo, etcétera", aseguró.
Luego, Mia contó cuando descubrió que la decisión de haber grabado pornografía iba a ser un desastre para ella: "Pero inmediatamente después de su lanzamiento, todo mi mundo quedó destrozado. La razón por la que pensé que estaba bien que hiciera porno era porque pensé que nadie lo descubriría".
Y agregó: "Hay millones de chicas que se graban a sí mismas teniendo sexo y hacen cosas así, y nadie sabe sus nombres. Nadie sabe quiénes son. Nadie las reconoce así. Quería hacerlo como mi pequeño y sucio secreto, pero me explotó en la cara".
Khalifa recibió un pago de US$12.000 por 6 videos que hizo a finales de 2014 cuando tenía 21 años.
"Ahora tienes 26 años, pero esto fue cuando tenías 21. ¿Miras a esa chica de 21 años y sientes que fue utilizada? ¿Fue una víctima?", le consultó el periodista, a lo que Khalifa reconoció: "Siento que aquella chica no tenía las herramientas para identificar que se estaban aprovechando de ella y que lo que le dijeron eran mentiras. Tal vez no mentiras, pero tratar de manipularme para que hiciera lo que ellos querían.
"Realmente no me veo como una víctima. No me gusta esa palabra. Tomé mis propias decisiones, a pesar de que fueron decisiones terribles", afirmó la joven que, cada vez que debe responder sobre sus películas asegura que tuvo "una especie de bloqueo" cuando actuaba en escenas sexuales.