Desde la FEM creen que el cierre de comercios llegó a su pico máximo entre febrero y mayo de este año y que los dos meses muestran un leve repunte de la actividad comercial.
Piden más compromiso a dueños de locales para evitar el cierre de comercios
Según registros del portal de datos abiertos de la Municipalidad de Mendoza entre abril de 2016 y 2018 se dieron de baja 1504 negocios mientras que en el mismo periodo se registraron 2342 altas de comercios arrojando así un saldo positivo 832 locales.
Sin embargo, al recorrer las principales calles del microcentro se observa una importante cantidad de negocios que han cerrado sus puertas o exhiben en sus frentes el cartel de "alquilo".
Al respecto Adolfo Brennan de la Federación Económica de Mendoza dijo a este diario que frente a una macroeconomía que funcional mal no es una novedad que el sector comercial esté en crisis aunque cree el pico máximo de cierres de locales ocurrió entre febrero y mayo de este año y que a partir de allí ha comenzado a notarse una incipiente recuperación, sobre todo en los últimos dos meses donde la caída en las ventas se redujo a la mitad en comparación al promedio acumulado durante el primer semestre. Aunque aclaró que ese repunte no llega a ser una mejora sino solo una caída menos pronunciada.
Pero más allá del mal contexto económico Brennan disparó una fuerte crítica hacia el sector inmobiliario, puntualmente respecto a los dueños de los locales sobre quien dijo que "tienen que ponerse las pilas y acompañar al sector comercial bajando sus pretensiones ya que tanto la Municipalidad como los comerciantes están haciendo un gran esfuerzo para que el centro no se muera".
Sin embargo desde el sector inmobiliario advierten que el valor de los alquileres no es el hoy el principal problema que enfrentan los comerciantes sino que es algo más que se suma a una estructura de costos casi asfixiante que incluye el pago de boletas elevadísimas de luz y gas, aumento de tasas municipales, altos costos laborales y una enorme presión tributaria. Además una fuerte retracción en el consumo y caída en las ventas que según la CAME acumula 19 meses consecutivos.
En ese sentido Juan Carlos Coccia, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Mendoza (CIM), indicó que hay negocios a los que ya no le dan los números y tienen que optar entre achicarse, mudarse a los alrededores, vender el fondo de comercio o directamente cerrar. Es difícil que un local que cierre abra en otro lado. En ese marco agregó que la actividad inmobiliaria en general está muy paralizada, que los locales no se alquilan rápido y que incluso le sugieren a los propietarios que acepten cerrar contratos por debajo del precio de mercado porque un local desocupado solo genera gastos.
En cuanto a la rentabilidad aseguró que es cada vez menor y que actualmente se ubica en valores que apenas llegan al 5% anual cuando en años anteriores ascendía a 8 y 10 por ciento. "Hoy muchos alquilan un local solo para mantener la inversión y los que pensaban en poner un negocio abren un plazo fijo" afirmó Coccia.
Por otro el titular de la CIM negó que los precios de los alquileres se hayan disparado ya que desde hace al menos dos años los contratos se actualizan en un 30% anual o 12.5% semestral lo cual sigue siendo muy inferior a la inflación.