Dos profesoras crearon un espacio de tango sin roles definidos por el género. Este jueves es tu oportunidad de participar.
Milonga queer: un lugar para el abrazo tanguero sin machismo
La milonga ha sido históricamente el lugar donde se ha refugiado el machismo. En ese intercambio en el que el hombre elige y saca a bailar a la mujer cuando le place, la lleva alrededor de la pista a su gusto y ella tiene que aprender a leerlo, esa es su capacidad, cumplir su voluntad, intentar firuletear hacia atrás mientras él avanza.
Nadie discute que la milonga es un lugar místico, que los acordes de un bandoneón pueden llegar a las más profundas entrañas de su ser, llevamos ese gen argentino adentro.
En la Milonga Queer las mujeres pueden guiar a los varones.
En esa disyuntiva se encuentra una comunidad que brega por la igualdad de género pero se le eriza la piel, se le van los pies y empieza a mirar alrededor buscando compañere para compartir un abrazo cuando suena Troilo.
Por esto es que Ivanna "La Tana" Cingolani y Mariela Alfonso se pusieron a la cabeza de la primera Milonga Queer de Mendoza que se realizó en la sala Elina Alba en la Secretaria de Cultura de la provincia y demostraron que se puede disfrutar del tango en un ambiente de diversidad.
Las profesoras Mariela Alfonso e Ivanna Cingolani
En estas milongas un hombre puede guiar a otro hombre, mujeres bailan con mujeres e incluso hay mujeres que pueden guiar a un hombre: "Esa es la idea, que sea una comunicación y no un monólogo. Antes era el rol de hombre guiar y la mujer la que percibía, ahora la idea es que haya una comunicación de verdad que si hay una pausa se tome y no importa quien lo haga, si quieren cambiar de rol también se puede", dijo a La Trenza, La Tana.
El tango es muy machista y si algunas personas se sienten incómodas con esa característica, puedan disfrutarlo igual: "ese era uno de los puntos más importantes de este proyecto. Precisamente hay muchas personas que quieren bailar tango y que habían llegado a alguna milonga tradicional y no habían vuelto. Yo me lo banqué porque el tango estaba encima de mis trabas en ese sentido pero sí, siempre supe que era necesario un espacio así".
También destacó: "lo quería hacer fuera del under porque necesitamos y merecemos visibilidad y porque está buenísimo. Mientras más diversidad y más visibilidad haya, más respeto hay también porque siempre uno tiene miedo a lo desconocido, si lo conocemos, dejamos de lado los preconceptos".
Comentó que hace 15 años que quería hacer esto: "El primer año fue arriba de los tacos en el rol que me correspondía por mi género y al año tuve suerte porque les dije a mis profesores que quería aprender a guiar y me dieron el ok y muchas compañeras se prendieron y me hicieron el aguante. Tuve algunos comentarios negativos de algunos hombres y de algunas mujeres pero se fueron yendo con el tiempo por suerte".
Para quienes se hayan quedado con las ganas, este jueves 8 de agosto se realizará en el Lobby Bar una nueva milonga queer. A partir de las 20 habrá una clase y a las 21:30 empieza la milonga. Para mayor información se puede consultar el Instagram Tango Queer Mendoza.
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