Marian Gómez golpeó a una uniformada cuando le ordenaron que deje de fumar en el subte. Ella luego dijo que la condenaron porque estaba besando a su esposa.
Piden absolver a la joven que golpeó a una policía
Una nutrida manifestación acompañó esta mañana la presentación de la apelación a la condena de Marian Gómez , la joven sentenciada a un año de prisión por "resistencia a la autoridad y lesiones leves", un "fallo sin perspectiva de género", dijeron, al denunciar que fue hostigada por las fuerzas de seguridad por estar besando a su esposa en la estación Plaza Constitución en 2017.
"En el día de hoy presentamos una apelación para que se revea la condena a Marian porque entendemos que es un fallo sin perspectiva de género, que en ningún momento evaluó la prueba que nosotras presentamos", señaló a Télam Rocío Girart, esposa de Marian, tras realizar la presentación en la puerta del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional N° 26, en Paraguay al 1500.
Y continuó: "Lo que le pasó a mi compañera no es excepcional, es parte de una situación que atravesamos todos los días las lesbianas y las compañeras trans y es necesario visibilizar; defenderse no es delito y nadie tiene que acatar una orden que no es legítima, ningún funcionario público puede requisarnos desnudas en una seccional policial".
Rocío expresó estas declaraciones en referencia a lo que sucedió después de que su esposa, Marian, fuera detenida el 2 de octubre de 2017.
Ese día, ellas se encontraban hablando mientras Marian fumaba un cigarrillo en la estación Plaza Constitución cuando al despedirse con un beso los policías Jonathan Rojo y Karen Villarreal la increparon para que apague el cigarrillo.
"Estábamos fumando en un lugar sin paredes donde no había carteles y había más gente fumando", declaró Gómez en su momento, quien contó que Rojo se dirigió a ella diciéndole: "Pibe, ¡apagalo!".
El 28 de junio pasado, en Día Internacional del Orgullo, el Tribunal Oral en lo Criminal N°26 a cargo de la jueza Marta Yungano condenó a Marian por los hechos desencadenados a partir de ese hostigamiento.
"La presentación del recurso de Casación debe ser resuelto por la jueza en el plazo de tres días. Nosotros apuntamos tres argumentos para apelar el fallo: el primero es que hay una aplicación errónea de la Ley, porque cuando se hace una condena por lesiones leves la acción tiene que se promovida por la víctima y esto no sucedió", explicó por su parte el abogado de Gómez, Lisandro Teszkiewicz.
Y siguió: " Villareal, quien supuestamente fue lesionada, declaró tres veces y en ningún momento pidió que se iniciara una causa contra la imputada; el segundo tema es que la jueza remite a la ley 26.687 que es una norma nacional sobre los espacios libres de humo, pero no aplicaría al lugar donde sucedieron los hechos que es jurisdicción de Ciudad".
"Y por último -añadió- que hay una valoración arbitraria, sesgada y discriminatoria de la prueba que nosotros presentamos".
Por su parte, Celeste Fierro, integrante del MST y parte de la Coordinadora para la Absolución de Marian Gómez, un colectivo conformado por numerosas organizaciones de la diversidad, sociales y de derechos humanos, sostuvo que "el fallo es emblemático en dos sentidos".
"Por un lado -sostuvo- es una muestra de una avanzada contra la población de la diversidad sexual y género que intentan seguir coartando nuestros derechos, pero por el otro vemos la respuesta en la organización y la lucha que es parte de esta nueva ola del movimiento feminista y disidente".
Marian llegó a la puerta del juzgado pasadas las 10.30 con un buzo con la leyenda "Lo Personal es Político" -consigna histórica del feminismo- junto a Rocío, donde la esperaba una nutrida concentración con carteles y cantos que, además de pedir su absolución, exigían la destitución de la jueza Yungano.
"Nosotras vamos a realizar una actividad por mes hasta conseguir la absolución", sostuvo Rocío.