Fue en Alta Montaña, arriba de Penitentes, donde mendocinos y turistas pudieron cruzar el cauce caminando y hasta se dieron el lujo de "patinar".
Se congeló un afluente del Río Mendoza y dejó postales inolvidables
Pocas veces se puede ver algo similar: este viernes se congeló un afluente del Río Mendoza en alta montaña, más precisamente, en el Río Cuevas, tanto que algunos lograron caminar y hasta "patinar" por encima del hielo.
Después de la triste temporada invernal en el norte de la provincia, en donde las nevadas fueron esquivas y obligaron a cerrar el complejo Los Puquios, apenas doce días después de su apertura, el frío les regaló a los visitantes una verdadera postal invernal.
Lo cierto es que un grupo de mendocinos se encontraba en la ruta internacional paseando en busca de nieve -que y si bien encontraron poco y nada- se llevaron una grata sorpresa, el Río Cuevas, un afluente del Río Mendoza estaba congelado.
Como si fuera poco, una joven que pudo presenciar el acontecimiento, contó al Post que el hielo estaba tan compactado que su madre y su prima alcanzaron a pasar caminando: "Incluso se animaron a patinar por encima y se divirtieron de lo lindo", aseguró.
Para intentar dar una pequeña explicación de lo que sucedió, fuentes de Gendarmería contaron que en esta jornada "la temperatura llegó a los 15° bajo cero y a la hora que ellos estuvieron debe haber rondado los -8°".
Sin embargo, y como si fuera poco, el deleite terminó de ser completo cuando el grupo familiar logró divisar un cóndor que se paró delante de ellos, justo donde terminaba el río helado. Por suerte para los registros, también fue fotografiado.