Técnicos del Iscamen expusieron en California junto a profesionales de Sanidad Vegetal del Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
Técnicos de Mendoza exponen en EEUU sobre el control de la Lobesia
Técnicos del Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria Mendoza (Iscamen) exponen en California sobre el operativo de control de la plaga lobesia botrana -llamada también 'polilla de la vid'- en la provincia, que involucró a más de ocho mil productores vitícolas.
En Napa Valley, California, profesionales del Iscamen intercambian experiencias junto a técnicos de Sanidad Vegetal del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, por la campaña y los resultados obtenidos en la provincia ante la efectiva mitigación de la plaga, que reducía hasta 30% de la cantidad de uva desde 2010, año en el que ingresó a la provincia.
"Las dos campañas desarrolladas han sido de dimensiones extraordinarias, por eso Mendoza es reconocida internacionalmente como el lugar con mayor tasa de transferencia tecnológica, en función a la cantidad de hectáreas, productores y financiamiento involucrado", explicó Alejandro Molero, presidente del Iscamen.
La visita técnica al país norteamericano incluye una agenda donde los profesionales locales podrán comparar no solamente los procesos de control empleados en el Valle de Napa, sino además el sistema productivo y su metodología de trabajo. Con esto se apunta a enriquecer la experiencia de trabajo de ambos países y sus modelos para el control de la Lobesia botrana.
Técnicos de Mendoza exponen en EEUU sobre el control de la Lobesia.
Esta misión complementa la visita realizada por referentes del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos a Mendoza durante agosto del 2018 y forma parte del trabajo de cooperación entre ambos organismos sanitarios.
La convocatoria surge luego de que en la provincia, tras dos operativos de control con articulación pública y privada, se redujeron las capturas del insecto 95%.
Ver: Preocupan los recortes de fondos para combatir la lobesia botrana
En Mendoza el área de trabajo comprendió alrededor de 160 mil hectáreas de vid y se llevó adelante bajo la premisa del manejo integrado de la plaga, que supone la combinación de diversas herramientas para lograr el resultado óptimo.
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