Mientras los juicios por alimentos se demoran o directamente no avanzan, las madres se debaten entre trabajar o cuidar a los niños.
Cómo "la reman" las mujeres cuando los hombres se borran
En el año 1140, el tiránico emperador Conrado III, sitió la ciudad de Weinsberg (Alemania) pero accedió a respetar la vida de las mujeres de la ciudad, permitiéndoles irse "con todo lo que pudieran cargar en sus espaldas". Cuando al día siguiente se abrieron las puertas de la muralla, las mujeres salieron en largo cortejo cargando a sus maridos, hijos o padres.
Para muchos, se trató de un acto de amor, pero también lo hicieron porque los hombres constituían su capital de trabajo más grande.
Entre 1140 y 2019 el mundo cambió mucho, pero los hombres siguen siendo el capital de trabajo más grande de una familia: cuando la mujer está sola, trabajar y cuidar a los niños se convierte casi en un imposible y esa situación las va tirando hacia el fondo de un pozo que nunca se sabe cuán profundo es.
Hace unos días, una jueza mendocina declaró "indigno" a un padre luego de que la madre de un joven demostrara que el progenitor había incumplido con la obligación alimentaria con su hijo.
La jueza Martinelli fue clara: "Que la gente tenga en claro que los alimentos hay que pagarlos para que nuestros hijos vivan".
Muchas mujeres se encuentran hoy en la desesperante situación de no tener trabajo, tener hijos chicos y, además, ser madres solteras o separadas de un hombre que no terminó de entender que un hijo tiene necesidades.
"Nunca me pasó un peso", es una frase trillada entre estas mujeres que se agrupan vía redes sociales. La mayoría deja claro cómo el "estar sola con los chicos" termina en algún grado de pobreza.
"Todo sobre Asignaciones"es una de las páginas de Facebook que muestra esta realidad. Patricia Aguilera fundó este grupo pensando, en principio, en ayudar a las mujeres a sacar los turnos relacionados con la AUH, y luego comenzó a poner días para comprar y vender y, cada tanto, hasta organiza posteos de "autoayuda".
Uno de esos posteos surgió esta semana. Patrcia largó: "Cuenten... ¿cómo la reman?". Y las historias no pararon.
Casi todas coincidían en el "estoy sola" y en el "mi ex nunca nos pasó un peso". Las mujeres fueron contando el proceso desde la separación a la desesperanza.
El mayor problema que atraviesan todas no es la búsqueda de empleo sino qué hacer con los niños. Muchas no tienen parientes cerca o, si los tienen, no cuentan con ellos. "¿Cómo hago para conseguir un trabajo si tengo un bebé y un nene de tres?". "Tengo un bebito, no tengo adónde dejarlo y, si pago una guardería me sale más caro que lo que me pagan", "Antes trabajaba en una casa que me dejaban ir con mi nena porque se porta re bien, pero cuando me separé me tuve que mudar muy lejos y no pude seguir trabajando ahí, ahora no consigo ninguna casa que me acepte con la nena y estoy sola".
"Changueo todo lo q puedo... limpieza planchado... de un trabajo sale otro y así... tengo 3 hijos de 10, 7 y 4, se me complica mucho irme a trabajar no cuento con quien los cuide ya que vivo sola con ellos, pago alkiler... el padre esta borrado del mapa... mi nena tiene ausencias... todos los meses tener q ir al Notti a buscar receta medicación y ni te cuento para conseguir un turno... todo es tiempo plata y tener q molestar a alguien q cuide los otros dos... aparte de las changas vendo ropa o lo q tengo al alcance para hacer unos pesos ya q nada alcanza... las boletas llegan y hay q pagarlas... mis hijos tienen ganas de un yogur, de tomar leche todos los días.. y ya ni eso se puede. ... no puedo con un laburo fijo xq no cuento con quien los cuide... solo cuando los dejo en la escuela me voy a trabajar y vuelvo sobre la hora con los huevos en la garganta xq no sé si llego... no estamos viviendo estamos sobreviviendo como podemos... me agarra un depre casi todas las noches... insomnio... preocupaciones...", es una de las respuestas al Post de Patricia.
No te ves tan pobre
Otro cachetazo que tienen que aguantar muchas de estas mujeres es no verse como pobres. Muchas de ellas vienen de una clase media baja o baja pero sin privaciones y, una vez separadas y con los chicos a cargo, se han visto en una caída libre que las llevó a un lugar que nunca siquiera pasó por sus mentes.
"Si no me habrá pasado..madre soltera.. Recuerdo que fui a pedir unos tickets..y me dijeron '¿vos lo necesitas enserio?' Solo x q no iba sucia y mal vestida.. la leche no me la dieron más cuando mi beba tenía un año y dos mese porque había subido un kilo más...busqué y busqué hasta que conseguí gracias a dios... Pero por un momento yo ya me había resignado e iba a trabajar de lo q sea, hasta lo peor... llore y lloré... casi pierdo hasta la dignidad.", escribió Andrea.
Mientras estas mujeres malabaristas intentan ganar el pan para sus hijos, muchas de ellas saben que los progenitores de los hijos trabajan pero los juicios demoran años y muchas veces aunque haya sentencia no se cumple.
Y hay un dato peor: muchísimas de estas mujeres saben que sus ex parejas formaron nuevas familias y ven a los padres de sus hijos con hijos nuevos, ya sea propios o ajenos, pero en mejores condiciones que los primogénitos.
"Lo mejor es ser madre soltera, porque vivir algo así yo creo que te parte al medio o que te convierte en asesina. Y está lleno de esos que se olvidan de sus hijos, no pasan un mango y después los ves paseando con auto nuevo o ves en el face las fotos de sus vacaciones. La justicia nunca actúa en esos casos", subrayó otra de las madres del grupo.
Patricia tiene un grupo en cada provincia. Se levanta tempranísimo y mientas se viste, viaja en el colectivo, come o hace cualquier cosa, saca turnos y responde preguntas. Al Post le dijo que "todas la reman, las historias dan para escribir un libro, pero me acuerdo de una que me escribió por privado para preguntarme si podía presentar los papeles para cobrar el retroactivo aunque su hijo hubiera muerto. Había muerto esa mañana, aplastado por el portón de la casa, y ella necesitaba la plata para poder enterrarlo".