El sacerdote está acusado de tocar las partes íntimas de los niños, llevarlos a dormir a su cama, observarlos mientras se bañaban y obligarlos a presenciar los abusos a otros chicos.
Un cura del Próvolo, refugiado de la justicia argentina en Italia
Eliseo José Pirmati, uno de los sacerdotes acusados de abusos en el Instituto Próvolo de La Plata, permanece refugiado a salvo de la Justicia argentina en Italia, la cual reclama su extradición al país.
Pirmati, de 83 años, está acusado de "abuso sexual agravado, exhibiciones obscenas y corrupción de menores", por hechos ocurridos entre 1980 y 1990. Las víctimas, hoy adultos, tenían entre 8 y 15 años al momento de los abusos.
Según publicó Diario Perfil, el sacerdote se encuentra refugiado en la Casa Madre de la Congregación Stradone Antonio Próvolo en Verona. La propiedad está vinculada al Instituto Próvolo de esta ciudad, donde también se han denunciado abusos desde 1950.
De acuerdo con el relato de las víctimas, en declaración ante tribunales de La Plata, Pirmati se dedicó a "cogobernar un infierno de violencia sexual, torturas, reducción a la servidumbre y esclavitud".
El sacerdote está acusado de tocar las partes íntimas de los niños, llevarlos a dormir a su cama, observarlos mientras se bañaban, obligarlos a presenciar los abusos a otros chicos y someterlos a castigos y tareas arduas de limpieza y mantenimiento.
El 29 de abril último, la fiscal Cordfield solicitó la extradición de Pirmati. El juez Jorge Moya Panisello autorizó el pedido, que ya está en trámite de traducción para ser enviado a las autoridades de Italia. De acuerdo a fuentes judiciales, tras más de cinco semanas, el exhorto aún está en proceso de traducción.
Ver: Kumiko, su verdad y que el Próvolo arda en el infierno
Pirmati llegó al Provolo platense en 1974, trasladado desde Verona. En La Plata se encontró con Nicola Bruno Corradi, otro sacerdote italiano que había sido trasladado desde la misma ciudad en 1970. Hasta fines de los 90, manejaron juntos el instituto, cuando Corradi se trasladó a Mendoza en 1997. Pirmati, por su parte, permaneció en La Plata hasta el 7 de diciembre de 2017, cuando regresó a Verona mientras avanzaba en la investigación en el Próvolo de Mendoza, pero aun no iniciaba la causa contra la sede del instituto en La Plata.