La figura política del gobernador terminó por convertirse en el hito de la convención radical. El partido centenario se ordenó detrás del mendocino, que se convirtió en un referente emergente fuerte.
El salto de Cornejo
Si hay que sintetizar el discurso de Alfredo Cornejo ante los convencionales radicales, surge naturalmente esta conclusión: le reclamó al presidente Mauricio Macri espacio para la discusión electoral, para que no gane Cristina los comicios de octubre.
Pero el discurso de 27 minutos en Parque Norte dejó mucho más que eso.
Fue un momento crucial para Cornejo como dirigente radical con aires de renovador, basado en la actual mirada liberal mayoritaria de la UCR.
Por eso intentó anclarse (y lo logró) en el discurso histórico de diciembre de 1985 del socialdemócrata Raúl Alfonsín en ese mismo lugar. El famoso "discurso de Parque Norte" del primer presidente de la democracia.
Los argumentos de Alfonsín, el padre de la democracia moderna, fueron una de las bases del discurso "antipopulista" que instaló Cornejo entre los radicales, que buscan rescatar algo del poder que parece estar dilapidando el macrismo.
Fue muy duro con la conducción del PRO: "Se ha hablado de mucho marketing y publicidad. A los argentinos se les debe hablar como gente adulta" dijo.
Le recriminó a Mauricio Macri que recién ahora leyó aquel discurso de Alfonsín.
Le reclamó a Macri tolerancia y respeto al radicalismo como integrante de una coalición de gobierno.
Es evidente que buscó desafiar al presidente con una actitud bien radical, al punto de no resistir a la tentación de entonar la marcha partidaria.
Digamos que Cornejo se graduó de conductor del radicalismo nacional que se esfuerza por no atomizarse en pequeños partidos distritales. Desde ayer, el país político conoció a otro Cornejo.
Mostró su faz política potenciada. Superando así a la arista del prolijo administrador de una provincia ordenada ubicada a 1100 kilómetros al oeste de Balcarce 50.
Es como si le hubiera dicho a Macri y a su círculo rojo, en clave política: ¿El PRO es más que la UCR para definir una estrategia y una táctica para sostener y recuperar el poder en un país vapuleado como la Argentina?
Por eso le recordó en tono "radical" que el partido de Alem fue fundamental para que Macri ganara la elección en la segunda vuelta.
Y le enrostró "errores garrafales" del gobierno central, como la conformación de la corte nacional, también criticó fallos de comunicación política.
También leé: Losteau, la apuesta de Cornejo
Ensayó una autocrítica como parte de Cambiemos pero lo hizo para facturarle al presidente el aumento de la pobreza y del endeudamiento en estos tres años y medio de gestión.
Valoró que haya 60 ex funcionarios detenidos por corrupción pero lo dijo para contrastar como una de las pocas acciones positivas por las cuales ha valido la pena estar dentro del frente gobernante.
Dejó notar que hubo una actitud colaborativa y propositiva de la UCR en cada momento de crisis, pero que nunca ha sido valorada por el macrismo como un aporte.
Volvió a demonizar al kirchnerismo como el abismo de la Argentina. Y volvió a endilgarle a Macri el crecimiento de CFK en la intención de voto.
Modos cornejistas
Histórico: "La Argentina no logró un desarrollo ni un sistema político como lo soñó Alfonsín".
Cálculador: "Este país tiene que producir 25 mil millones de dólares más en su riqueza para recuperar a la clase media".
Denunciante: "Este gobierno solo le ha dado ajuste a la clase media".
Geopolítico: "Esta movilidad social ascendente está en peligro por el populismo en los países centrales y también en los países hermanos de Latinoamérica".
Reclamante 1: "Estamos pidiendo algo razonable. Debemos decirle que queremos una nueva coalición. No importa el nombre pero que se respete a los ´partidos. Debe ser tolerante el presidente Macri".
También leé: El grito de las mujeres radicales
Reclamante 2: "Que el presidente no decida la estrategia electoral en soledad. El presidente no tiene prerrogativa en Cambiemos".
Comparador: "Queremos una coalición como lo tienen nuestros vecinos Uruguay o Chile que tienen un protocolo de debate".
Autocrítico: "Si fuéramos tan exitosos no tendría ninguna chance Cristina Fernandez de ganar las elecciones".
Profético: "El populismo de Alberto y Cristina Fernández no sacará a la población de la pobreza".
Estilo
Queda la sensación de haber presenciado la llegada de Cornejo a un punto alto en su trayectoria política y partidaria.
También parece haber llegado a su modo: tejiendo con paciencia una red para arribar al momento clave, sabiendo que iba a ganar su posición y desde allí, erigirse frente a Macri como el radical con más poder en el país.
Cornejo siempre escala sobre peldaños con antideslizante. Nunca dará un paso ascendente si no tiene la certeza que quedará parado.
Como ejemplo sirve un recuerdo un dirigente filo K así: "En 2011 me preguntó si se presentaba para gobernador... qué chances tenía según mi mirada. Le dije que Cristina arrasaba y que yo que él ni me presentaría. Y fue lo que hizo, esperó un periodo más y armó todo para llegar".