Más de un centenar de trabajadores llegaron desde el Sur provincial para visibilizar su conflicto y a la espera de respuestas del gobierno.
La Colina se coló en la campaña electoral
El posible cierre de la fábrica conservera, que tiene más de 70 años en el mercado, está en la cabeza de los empleados desde hace meses y esta vez la protesta llegó hasta el Gran Mendoza.
Cerca de 120 empleados de La Colina, ubicada en San Rafael, viajaron desde el Sur provincial hasta el microcentro mendocino a pedir una ayuda del Estado por la crisis en la industria.
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"La situación nuestra es de años, pero se ha profundizado ahora con este gobierno. Un gobierno que abre las exportaciones al rubro frutihortícola", explicó al Post David Cabezas, uno de los delegados presentes en la puerta de la Legislatura.
"Vemos en peligro 700 puestos de trabajo. Entonces nuestro pedido es para trabajar, estamos convencidos de que el gobierno de Mendoza tiene parte de responsabilidad con la situación de la fábrica", añadió.
"Nos hacemos presentes acá, nos arrimamos en son de paz para que no se cierren los puestos de trabajo. Nos van a recibir adentro en el salón Azul a los delegados y a un grupo reducido de trabajadores", concluyó Cabezas.
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Los senadores que estaban sesionando interrumpieron sus reuniones, en especial los bloques de la oposición y terminaron comprometiéndose a que las comisiones de Economía y Trabajo sesionen en la misma planta industrial inactiva.
Mañana cuando el gobernador se encuentre en San Rafael habrá otra movilización para hacerle saber al mandatario el reclamo del no cierre y encontrar el apoyo estatal para que sea una cooperativa de trabajadores que se encarguer de hacer funcionar la industria agraria.
De este el conflicto social real se coló en los temas de campaña de los candidatos.
La situación en San Rafael
Los trabajadores del Sur comenzaron a juntar firmas hace días en pleno centro del departamento para evitar el cierre de la fábrica.
Los obreros aseguraron que la última fue la peor temporada en mucho tiempo. "Trabajamos un mes, cuando años atrás lo hacíamos tres o cuatro meses", explicaron.