Fin de las jubilaciones de ama de casa

Las jubilaciones de ama de casa son un gran respaldo para mujeres que tuvieron que trabajar a lo largo de toda su vida sin registrar con patrones injustos,  para aquellas que tuvieron que criar solas a sus hijas e hijos y ocuparse de las tareas diarias del hogar. 

Son sin duda, un reconocimiento al esfuerzo, al trabajo de todos los días. Son un derecho y una política de igualdad de género. Pero hace unos días nos desayunamos que no existirá más la moratoria para poder jubilarse. Doble violencia, en lo económico y lo simbólico.

A partir de la moratoria cualquier persona podía inscribirse para poder percibir un seguro social. Esta moratoria implicaba el pago en cuotas de la deuda, reconocida por los años no aportados. Se declaraba una deuda por aportes impagos y se saldaba con un plan de pago en cuotas, que se iban descontando de los haberes mensuales una vez que ANSES otorgaba la prestación. Los aportes se pagaban, no eran  jubilaciones "gratuitas" como se difunde a menudo.

En su aplicación pudieron acceder a este beneficio más de 3 millones de personas, hay un gran porcentaje conformado por mujeres, sin embargo, el 23 de julio de corriente año, nadie más podrá percibirlo.

Por otro lado, se podrá acceder a las PUAM (Pensión Universal Para el Adulto Mayor), pero es solo el 80% de una jubilación mínima. En el Presupuesto para este año se estableció que quienes reciben esta pensión no pueden seguir trabajando. No sólo se retrocede en materia de inclusión, sino que vuelve a invisibilizar y desvalorizar el trabajo doméstico y de cuidados que sostiene nuestras sociedades. 

Las PUAM estipulan un aumento de la edad a partir de la cual se puede percibir el beneficio (de 60 a 65 años) y no es compatible con la percepción de otro beneficio social, únicamente con la Asignación Universal por Hijo/a, por Hijo/a con Discapacidad, Cónyuge y Ayuda Escolar Anual y debiendo optar por uno u otro.

En Mendoza el desacuerdo es claro, pues ya hay convocatorias activas en contra de esta medida. Desde el colectivo Ni Una Menos han incluido en su invitación a la histórica movilización del 3 de junio a los grupos perjudicados por esta medida de Cambiemos. Distintos sindicatos, organizaciones y mujeres autoconvocadas invitan a marchar para mostrar el total desacuerdo con estas políticas de ajuste del gobierno que siguen la línea de pedidos del FMI.