Un instante judicial que será difícil de olvidar para los que estuvieron en la sala del primer juicio contra el ex intendente y su esposa por un caso de corrupción. La crónica de 22 minutos de una tarde importante.
Las 18:08, la hora de Lobos
-Entonces, ahora... ¿quedamos presos?
-No, no, todavía hay otras instancias...
El intercambio entre Claudia Sgró y su abogado Fernando Luque fue una traducción de cómo cayó la sentencia en la sala ubicada en el subsuelo del edificio de Tribunales.
La lectura del fallo cayó como un bloque de cemento encima de todos los que estuvimos allí.
Escuchar al funcionario judicial decir "la inmediata detención" de Luis Lobos y su esposa fue un choque, un temblor. Entonces todos se preguntaron: "¿van en cana?".
La espera del matrimonio Lobos-Sgró
Ese momento dentro de la audiencia, a las seis y ocho de la tarde de ayer miércoles 9, tiene que haber sido un momento frío, helado en la vida de los imputados y ahora condenados a 4 años y medio él y 3 años y un tercio ella.
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Fue la consecuencia por defraudar al Estado y quedarse con casi medio millón de pesos de las arcas municipales al falsear un contrato de trabajo para provecho propio.
Era el primer final (falta la apelación y el fallo de casación) del caso conocido como el de la "mucama ñoqui".
Lobos en Tribunales junto a su esposa.
El caso de la mujer y su hijo que estaban registrados como empleados municipales, pero trabajan como servicio doméstico ella y jardinero él, para la suegra de Lobos.
Quien procesó ese fragmento judicial fue el fiscal Sebastián Capizzi que transparentó lo que lo movilizó a impulsar la primera de las cuatro causas que envuelven al ex intendente de Guaymallén.
"Queda claro para todos los dirigentes, de ahora en más, que tener ñoquis es un delito y que tiene una sanción", dijo el magistrado en la puerta de la sala de audiencias número 4.
Capizzi tiene su propia lectura de la frase "detención inmediata" cuasi fatídica para el tándem Lobos-Sgró.
"Fue una acción de efecto del tribunal, pero no procesal porque no es efectiva la sentencia hasta que no esté firme, y puede haber una apelación. Lo que quisieron decir los jueces fue que, para ellos, los condenados deberían estar presos inmediatamente", dijo con certeza el fiscal.
Quedan en la zaranda las declaraciones del abogado del matrimonio sentenciado que aguantó el impacto del fallo y eligió el andarivel de la política partidaria para explicar lo sucedido.
Luque dijo que, en otro contexto político, la sentencia hubiera sido absolución.
O sea, atribuyó al tribunal el dejarse influenciar por el clima electoral.
Es decir, para el letrado, los jueces del Tribunal Penal Colegiado 2 sintieron la presión política, teniendo en cuenta que Lobos es peronista.
La tarde húmeda y gris de ayer cerró con el abogado Luque defendiendo al ex intendente y a su mujer ante las cámaras de los noticieros de la televisión abierta en las puertas de Tribunales.
La carga política que le atribuyen los que acompañaron a Lobos.
A las seis y media, el abogado defensor trataba de explicar a los medios lo que había ocurrido 22 minutos antes.
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