Beresheet, una nave sin tripulación, tuvo una falla en su motor y no logró la hazaña.
La nave de Israel se estrelló en su descenso a la Luna
La nave espacial israelí Beresheet, que este jueves iba a alunizar, se estrelló y no logró posarse sobre la superficie del satélite.
"Hemos fracasado, pero lo hemos intentado", fueron las palabras con que el empresario israelí Morris Kahn -que invirtió más de 30 millones de dólares en la gesta- resumió el episodio.
El centro de mando perdió la comunicación con la sonda después de que empezara su maniobra para posarse en la superficie lunar, por lo que creen que se terminó estrellando.
La misión espacial fue dirigida por el profesor Oded Aharonson, del Instituto Weizmann y contó también con la participación del argentino ingeniero Diego Saikin, quien diseñó el software de simulación de la nave.