Gustavo Arribas y Silvia Majdalani respondieron preguntas ante la Bicameral de Inteligencia en el Congreso.
Los titulares de Inteligencia negaron vínculos con espías paraestatales
Los máximos responsables de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, negaron este jueves en el Congreso cualquier vínculo con el aparato "paraestatal" de espionaje que investiga el juez Alejo Ramos Padilla, pero la oposición afirmó que "es imposible que funcionara sin haber sido detectado" por el organismo oficial.
La Comisión Bicameral de Control de las Actividades de Inteligencia del Congreso recibió a Arribas y Majdalani para seguir indagando en los alcances de la causa que involucra al falso abogado Marcelo D Alessio, los ex policías Aníbal Degastaldi y Ricardo Bogoliuk, el ex espía Rolando Barreiro y al fiscal federal Carlos Stornelli.
Al término de la reunión (que fue a puertas cerradas por el carácter reservado de los temas que trata esa comisión), el diputado oficialista Daniel Lipovetzky ratificó que la AFI no está relacionada con la red de espionaje investigada, pero el senador kirchnerista Marcelo Fuentes le atribuyó un grado de responsabilidad y puso en duda el informe de Arribas y Majdalani.
Gustavo Arribas, titular de la AFI.
Lipovetzky indicó que "la conclusión mayor" del encuentro "es que no hubo intervención de los organismos públicos" en el caso que detonó el escándalo de espionaje y que "lo que hubo fueron personajes que cometieron delitos con una red paraestatal".
Según el diputado, Arribas y Majdalani informaron que Barreiro "fue funcionario de la AFI, sobre todo durante la gestión anterior, hasta mayo de 2016", con lo cual se desligaron del espionaje ilegal del que habrían sido objeto, según la investigación, periodistas, políticos, y jueces de la Corte Suprema.
Consultado por NA, Lipovetzky señaló que los responsables de la AFI no le acercaron a la comisión el listado de espías activos y separados del organismo oficial, como había solicitado, aunque los legisladores sí les preguntaron "sobre las personas que son agentes".
Por otro lado, ratificó que los ex policías Bogoliuk y Degastaldi eran parte de ese aparato "paraestatal", al tiempo que calificó a D Alessio como "un delincuente".
En la misma línea, el presidente de la comisión bicameral, el senador oficialista Juan Carlos Marino, señaló que "hasta el momento tanto en lo presentado por Ramos Padilla como en lo comentado por los titulares de AFI no existen pruebas concretas de que la Agencia esté involucrada en acciones de inteligencia paralela o paraestatal".
Fiscal Carlos Stornelli.
Además, Marino confirmó que la comisión acordó entregarle al juez federal Claudio Bonadio (a cargo de la "causa de los cuadernos" que tiene como fiscal a Stornelli) la versión taquigráfica de la reunión que mantuvieron hace dos semanas con Ramos Padilla.
En tanto, Fuentes sostuvo que "es imposible que una agencia de inteligencia paralela de esta magnitud funcionara sin haber sido detectada" por el aparato oficial de la AFI y que, por ello "hay que desentrañar si tenía o no vinculación con la Inteligencia oficial".
El senador consideró que "las respuestas (de Arribas y Majdalani) no fueron satisfactorias" porque "mostraron una ignorancia absoluta" sobre la actividad de esta red y agregó: "Lo grave no es la extorsión (que era, según la causa, el objetivo del aparato de espionaje) sino que se dedique a perseguir políticamente".
Además, el presidente del bloque de senadores del Frente para la Victoria consideró que "el fiscal Stornelli tiene participación" en la red que integraban D Alessio y Barreiro.
De esta manera, dio a entender que podría existir un vínculo entre ese aparato "paraestatal" y alguna de las causas judiciales que acechan al kirchnerismo.
Según supo NA de fuentes que participaron de la reunión, hubo momentos de tensión debido a que Majdalani mostró una actitud "confrontativa" y tuvo lugar un cruce con el diputado kirchnerista Leopoldo Moreau.
De hecho, desde afuera de la oficina del sexto piso del edificio anexo del Senado donde se desarrolló la reunión, se escucharon algunos gritos.
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