Roberto Cerruti manejó un Hércules durante el combate y confesó situaciones que le tocó vivir. "Fuimos los primeros en aterrizar en las Islas con la pista bombardeada", aseguró.
El recuerdo de la guerra de Malvinas, relatado por un aviador
Roberto Cerruti, capitán de uno de los aviones Hércules que se usó en la guerra de Malvinas, contó su experiencia en las Islas. A pocos días de cumplirse 37 años del comienzo del conflicto armamentístico, el aviador aseguró que durante más de 15 años, "nadie habló de la guerra".
"Funcionábamos como equipo compuesto por tres oficiales y cuatro suboficiales. Cada uno cumplía una función y si alguno de los siete no podía estar el avión, yo no podía volar", relató Cerruti en el programa Te digo lo que Pienso que conduce Ricardo Montacuto por Nihuil.
Sobre sus comienzos, el aviador relató que eligió esa carrera porque le gustaba la aviación. "Parecía que era mi profesión pero con el tiempo me di cuenta que era una vocación: tenía por hacer lo que se hacía dentro de la Fuerza Aérea".
Cerruti relató su historia en la guerra.
Cerruti comentó que durante los vuelos de guerra el escuadrón Hércules hizo varias tareas. Una habitual era aterrizar en Malvinas con la pista bombardeada, a punto tal que la tripulación fue la primera en aterrizar el 6 de mayo. "Hicimos lanzamiento de cargas, dos se hicieron en Malvinas, y reabastecimiento de combustibles en vuelo", comentó.
Durante el combate había tareas que no estaban escritas en ningún lado: marcación de blancos navales y después de la última tarea, donde nos presentamos dos voluntarios, era para volar un Hércules que le habían puesto bombas para interceptar a los buques ingleses que venían navegando por medio del Atlántico.
"A partir del 2 de abril éramos tripulaciones fijas. Cada tripulación estaba conformada por siete personas y aterrizamos con el avión N°2 en Malvinas. Volábamos todos los días. A partir del 1 de mayo los Hércules quisieron entrar en Malvinas y era una sola competencia hasta que nos tocó a nosotros", relató.
El aviador comentó que durante 15 años nadie habló de la guerra.
También recordó un escape en la detección de vuelos que hacían por el mar: "Hicimos muchísimos vuelos y buscábamos buques ingleses. Obviamente que buscar buques era ir rasante hacia un buque que no sabíamos qué era hasta que estábamos arriba y lo identificábamos. Muchos no tenían nada que ver pero una vez, un día de lluvia, nos empezamos a acercar a un buque hasta que vimos que era una fragata inglesas de donde despegaban helicópteros y demás. Hicimos un viraje violento y escapamos de la zona. Tuvimos suerte", dijo.
"Esto es muy loco pero mientras más bajo volabas era más difícil que nos detectaran los ingleses, íbamos arriba del agua a 30 metros, 40 metros, a una velocidad de 400 kilómetros por hora".
Sobre cómo vivió la posguerra, expresó: "A mí personalmente, y después lo escuché de muchos veteranos, los primeros 10 o 15 años nadie hablaba de la guerra. El que voló en la guerra no habló de ella porque era una cosa difícil de expresar, después uno se va aflojando", al tiempo que aseguró que volvería a las islas.
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