El Post habló con el abogado del presunto asesino de las ciudadanas israelíes. ¿Se hace cargo Gil Pereg de los crímenes? ¿Por qué tenía tanto dinero? ¿Está loco?
Los secretos de Gil Pereg, contados por su abogado
Nicolás Gil Pereg no precisa presentación: es el misterioso ciudadano israelí que está siendo juzgado por el presunto crimen de su madre Pyrhia Sarusi y a su tía Lily Pereg, cuyos cuerpos sin vida fueron encontrados el pasado 26 de enero.
El Post logró hablar extensamente con su abogado, Maximiliano Legrand, quien se prestó a responder acerca de todo lo que se le preguntara.
-¿Desde cuándo es abogado de Gil Pereg?
-Soy abogado de Gil Pereg desde el 4 de febrero.
-¿Cuántas veces se ha reunido con él?
-Lo he visto ya en cuatro o cinco oportunidades. El que más lo ha visto es Lautaro, que es mi socio.
-En algunas de esas oportunidades en que lo vio, ¿denotaba la conducta que se ve en los videos?
-Sí, incluso conductas más extrañas.
-¿Por ejemplo?
-Más que nada tiene que ver con los pedidos que hace. Cosas que dice. Yo mucho no lo hablo, pero me comenta que es muy denso para hablar, que es muy verborrágico, entonces, habla y habla y tiene ideas fijas sobre las que estructura el diálogo. Ideas fijas como sus gatos, por ejemplo.
-¿Cómo logra comunicarse con él?
-Él responde lo que quiere.
-Debe ser difícil defenderlo en esas condiciones...
-No solamente es difícil, sino que nosotros tenemos que tomar la iniciativa legal, porque lo que tiene que defender está enfrente de uno y no se da cuenta hasta que uno se da cuenta que la persona desvaría, delira, esa es la palabra. En ese momento lo que tenés que defender es que está delirando, y no lo que plantea, porque plantea locuras, como pedirle al juez que lo enterrara en el zoológico, entre otras cosas.
-¿Qué ocurrió con los peritajes psiquiátricos?
Hubo dos peritajes de los psiquiatras que lo vieron un ratito no más y dictaminaron algo e hicieron un informe previo, y los psiquiatras del cuerpo médico forense. Los peritos psicólogos, entre ellos el perito de parte nuestro, son los que hacen como un mes están yendo a verlo varias veces y realmente están investigando de toda manera posible y estudiarlo realmente. Por eso se demora tanto el dictamen, porque son los únicos que han estado trabajando en serio.
-¿No arribaron a ninguna conclusión previa aún?
-Hay un informe previo del cuerpo médico forense división psiquiátrica que es aparte de la psicológica. Ese informe es falaz porque va en contra del informe de los psiquiatras del penal que son los que los están viendo realmente y reflejan la verdad. Hay un informe del Dr. Torres, del penal, que dice que Gil Pereg es una persona que delira, que tiene alucinaciones y que básicamente es un enfermo psiquiátrico, incluso dice que es un riesgo para su persona y para terceros.
-Y el informe supuestamente falaz ¿qué sostiene?
-Todo lo contrario, pero digo que es falaz porque está hecho por seis peritos del cuerpo médico forense interesados, porque dependen de la fiscal, además no dejaron constancia cuando lo vieron de que él estaba medicado con antipsicóticos desde que ingresó al penal. No le pusieron ni empeño. Además tiene detalles erróneos, como la edad que tiene. No sabían ni eso. Decía que tiene 30 años cuando tiene 36. Además es muy escueto y ambiguo.
-Y el otro peritaje, el más concluyente ¿cuándo estará listo?
-Creo que va a salir, creo, pronto. Lo que pasa es que los peritos psicólogos que son los que realmente trabajan, quieren seguir investigando, porque no es un caso fácil como para ir a verlo una vez 30 minutos, es una persona muy compleja que habla un idioma diferente. Es un caso que merece mucho estudio porque es muy trascendente, incluso a nivel público.
-¿Cómo describiría la sensación de llevar a cabo la defensa de Pereg?
-Para nosotros es el caso más interesante que hemos tenido, porque en este caso estamos defendiendo a una persona que es un enfermo psiquiátrico, que es realmente muy malinterpretado por la sociedad, está visto como algo que no es. Es un desafío, pero también tiene que ver con hacer justicia.
- ¿Cuando le preguntan a Gil Pereg por el doble crimen, reconoce haberlo cometido?
-No, lo niega. Él niega incluso estar loco. La otra vez le dijo al juez "ustedes pueden pensar que yo soy un loco, pero no lo soy; respeto su opinión de que digan que soy un loco, pero no lo soy". Él niega su estado. Yo quería que el juez escuchara un audio de una charla con él porque es muy raro para hablar, por ejemplo tiene ciertas personas de confianza a quienes le responde cuando le dicen algo, pero si no sos de su confianza, le hablás y no te responde.
-Pero las anotaciones en sus cuadernos sobre la plata que prestaba e intereses y demás, parecieran ser de una persona racional...
-Si vos a mí me prestás 70 mil dólares y yo lo anoto en una libretita... ¿eso te parece racional? Me harías firmar algo, no sé, un pagaré al menos. Él no tiene pagarés, no tiene contratos mutuos, nada, siendo que él tenía prestado miles y miles de dólares. Eso no es racional.
-¿Y respecto a las cantidad de sociedades que tenía abiertas?
-Con respecto a eso vamos a hacer una denuncia. Yo en un principio no le presté mucha atención porque estábamos enfocados en otra cosa, pero averiguamos que él tenía cuatro o cinco sociedades que se las hizo constituir una tercera persona, un "X", que se llama Marcelo Sendra, yo tengo el nombre y vamos a denunciarlo. Este X agarró a esta especie de vagabundo con miles de dólares y lo hizo hacerconstituir cuatro sociedades anónimas y firmar cheques en blanco, esos cheques eran limpios, porque nunca fueron rebotados, y estaban firmados por el director, que era él, prácticamente un peón en todo esto. Quien luego quedaba complicado era Pereg con todos los cheques rebotados a través de la sociedad. Yo me di cuenta que él no era "el lobo de Wall Street", como muchos piensan, porque yo me preguntaba, cómo es que hacía este tipo mugroso y oloroso para abrir sociedades y vender cheques a la gente, y no, no era la gente, era un solo, que es Sendra y lo hacía hacer de todo.
-¿De dónde provenía toda esa plata que tenía?
-La madre le mandaba miles de dólares para que se las manejara.
-Pero, ¿para qué?
-Para que él hiciera negocios. Negocios tan exitosos como pueden serlo los negocios creados por un loco. Nada de lo que hizo fue fructífero. Si el prestaba miles de dólares y lo anotaba en un cuadernito, y no se lo prestaba tipos solventes. Otras cosa indicativa es que vio a un arquitecto para hacer unas canchas de padel, el arquitecto se ofreció a hacerle los planos por 150 mil dólares y él sacó una bolsa de plástico, sacó la plata y se los dio. Obviamente el arquitecto no le hizo nada, porque eso debería haber salido 20 mil pesos. Cuando él se quejó de que no le hacía las cosas, el arquitecto le pidió 50 mil dólares más para terminarlo en este año. Así fue que el arquitecto se borró con 200 lucas verdes. Al arquitecto le suspendieron dos años la matrícula por haberle hecho esto a Gil Pereg; el Colegio de Arquitectos no sabía cómo se había hecho de 200 mil dólares. Ejemplos como este hay muchos. A Gil Pereg ya querían internarlo en Israel hace 10 años, la verdad es que a medida que lo voy conociendo, más concuerdo con el informe del Dr. Torres.