La expresidenta y senadora por Unidad Ciudadana acompañará a su hija Florencia en un tratamiento de salud.
Cristina llegó a La Habana y fue recibida por el canciller de Cuba
Cristina Kirchner llegó a La Habana, adonde viajó para ver a su hija Florencia, quien se encuentra en Cuba para realizar un tratamiento de salud.
La ex Presidente fue recibida por el canciller Bruno Rodríguez Parrilla, quien informó el encuentro a través de las redes sociales.
"Recibí esta tarde en el aeropuerto internacional José Martí, a la senadora y expresidenta de la República #Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, quien viaja a #Cuba en visita privada", escribió el funcionario.
A las 7 de este jueves, cuando la ex jefa de Estado se encontraba rumbo a una escala en Panamá en un servicio de la aerolínea Copa, su equipo de comunicación difundió un video de casi cinco minutos donde se pueden ver imágenes de la joven cineasta y se escucha la voz en off de CFK, quien explica cuál es el cuadro que atraviesa su hija.
"Mi hija, Florencia, producto de la persecución feroz a la que fue sometida, empezó a tener severos problemas de salud. El brutal estrés que sufrió devastó su cuerpo y su salud", introdujo la ex Presidente.
Y continuó: "Es muy terrible para una joven, que la acusen de haber ingresado a una asociación ilícita el mismo día que murió su padre, sí, el 27 de octubre de 2010".
Si bien no dio precisiones sobre cuál es la enfermedad que aqueja a Florencia Kirchner, la senadora nacional de Unidad Ciudadana contó que, como consecuencia de la patología, "no puede permanecer sentada ni de pie por períodos prolongados de tiempo". Y reafirmó: "La persecución que han hecho sobre ella, y que la ha devastado, es porque es la hija de Néstor y Cristina Kirchner".
De acuerdo a lo que informaron los abogados de la ex Presidente, Florencia Kirchner padece de una enfermedad llamada linfedema, que significa la acumulación de líquido linfático en las piernas.
Además, el dirigente peronista Eduardo Valdés, cercano al Papa Francisco y a la ex mandataria, afirmó que Florencia se encuentra realizando un tratamiento "producto de muchos ataques de pánico". "Permanentemente sentía, a través de trascendidos periodísticos, que la iban a detener, y no podía congeniar el sueño", reconoció el ex embajador en el Vaticano en comunicación con radio Continental.
"La ex presidenta se banca todo lo que le pase a ella, desde la política; pero es muy difícil cuando te tocan a tu hijo, ahí le duele mucho, el doble. No la vi bien a Cristina, es la primera vez que la vi golpeada, la vi muy dolorida", admitió.