El sistema camina organizado pero con algunas demoras en el carril de vehículos particulares.
Así funcionó el MetroBus: primer día hábil e inicio de clases
Tras su debut del pasado lunes en la avenida San Martín de Godoy Cruz, en el tramo que va desde Tiburcio Benegas hasta el Casino, el MetroBus tenía esta mañana su primer prueba de fuego ante la mirada de todos los mendocinos.
Para el sistema comenzaba el verdadero examen: primer día hábil de los carriles exclusivos y la vuelta a clases de miles de alumnos que transitan por la calle central del Gran Mendoza.
Si bien en las semanas previas algunas paradas -islas- estuvieron funcionando por la culminación de las obras, muchos los pasajeros no se acostumbraron y hoy se mostraron sorprendidos por las instalaciones. "Hay que ver como funciona, en hora pico, con autos estacionados y estacionando. Todo", expresó Manuel mientras esperaba el 110 para ir a trabajar al centro.
Los usuarios parecieron conformes con el servicio, las islas son amplias y cómodas, tienen asientos, rampa para discapacitados y se ubican, entre si, a unos 400 metros de distancia.
Del otro lado, del carril y de la opinión, estaban los automovilistas, algunos furiosos por las largas colas que se armaban en su trocha, otros intentando adaptarse al cambio de a poco, cometiendo infracciones y circulando por zonas indebidas.
En cada semáforo en rojo del recorrido, las filas de automóviles llegaban hasta la cuadra anterior y en ocasiones superaban esa marca. Bocinazos y quejas. "Imaginá esto al mediodía, con toda la gente volviendo a su casa", gritaban los conductores.