El ascenso para hacer cumbre en la montaña más alta de América está permitido para personas a partir de los 14 años. Expertos debaten sobre el tema.
¿El Aconcagua es apto para chicos?
Durante el martes a la mañana, Mendoza amaneció con una noticia que estuvo al borde de la tragedia: un niño estadounidense de 13 años sufrió un edema pulmonar en el Parque Nacional Aconcagua, a más de 5 mil metros de altura, fue rescatado y se encuentra a salvo.
¿Está bien que un menor pueda realizar el ascenso al Aconcagua, la montaña más alta de América con 6.961 metros sobre el nivel del mar?
Según el Parque Nacional Aconcagua, dependiente de la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial, para el ingreso para mayores de 14 años y hasta 18 años (mayoría de edad en Argentina) se deberán presentar "una autorización de ambos padres firmada ante escribano público y certificada por Colegio de Escribanos del lugar de residencia".
Así mismo, en el "caso que el menor ingrese al Parque junto a uno de sus padres, deberá presentar la autorización firmada por el padre restante" y un documento donde se declare que acompaña al menor en la expedición y que, "ante cualquier infortunio que pudiera ocurrirle al mismo, corre bajo su responsabilidad".
El Parque determinó que la firma de la autorización por ambos padres es condición excluyente para los países donde la Patria Potestad es compartida, como Argentina. Donde la Patria Potestad es indistinta, sólo se requerirá que la autorización sea firmada por el padre que esté a cargo del menor.
Ver: Rescataron a un niño en el Aconcagua que sufrió un edema pulmorar
¿Qué pasa con los extranjeros? La autorización deberá ser firmada por un "notario público y certificada, en este caso, con la apostilla de La Haya (condición excluyente) certificación que da validez a los documentos internacionales".
¿Por qué ingresan menores?
Sebastián Melchor, director de Recursos Naturales Renovables, explicó que, si bien el Parque puso el límite a mayores de 14 años, "la Justicia falló a favor de que los padres tienen el derecho de decidir si sus hijos pueden subir o no. Esto ha posibilitado que, con una resolución particular de la Dirección de Recursos Naturales y con un dictamen legal y técnico, los menores puedan ascender".
"Hay que pensar que hacer el ascenso al Aconcagua es una actividad de riesgo para cualquier edad y por lo tanto hay que ser muy responsable", manifestó el funcionario.
Además, detalló que "los controles médicos que tiene el Parque Nacional Aconcagua son de altísimo nivel, son obligatorios en cada uno de los campamentos base. Nos permite a nosotros tener un seguimiento permanente de todos los que han ingresado".
"Cualquier situación anómala médica nos permite no dejarle continuar ascendiendo o evacuar a la persona. Lo que a nosotros nos interesa es tener, con nuestro propio servicio médico de alta montaña, la certeza de cuál es el estado de salud de cada visitante", agregó.
El chico de Estados Unidos presentó los papeles correspondientes para poder ingresar. Desde Ambiente, "lo que nosotros hacemos es chequear que vayan con un guía de experiencia, con el equipamiento adecuado y que vaya con los padres, asumiendo el riesgo de lo que significa esta actividad", dijo Melchor.
"En el caso del chico, su padre era el tour leader (responsable de viaje) de esta expedición y por lo tanto asumía el riesgo de la situación que estaba planteada", explicó.
Seguro obligatorio
El funcionario dijo que desde la temporada pasada, "los visitantes están obligados a tener seguro. Eso nos permite que todos los mendocinos no tengamos que pagar este costo extra que significa la evacuación de emergencia de un visitante. En este caso del niño se está haciendo cargo de las atenciones necesarias y de la evacuación en el helicóptero".
La opinión médica
"He ido al Aconcagua, no he hecho cumbre pero conozco", contó el médico pediatra Raúl Rufeil, ex director del Hospital Notti.
Ante la consulta si un chico de 13 años puede subir al Aconcagua, determinó: "A mi modo de ver, tienen que tener más de 16 años para esa actividad. Un padre no puede tomar ese recaudo. Más chicos no están preparados ni en condiciones para un ascenso, porque además de la preparación física también está la fase psicológica".
"Lo ideal es que suban a partir de los 16 o 18 años. Cuando les comience a faltar el oxígeno en la altura se van a asustar. Existen además los imponderables, por más estudios avanzados que se hagan, cada organismo responde en forma diferente", agregó.
"A más de cinco mil metros le puede dar el 'Mal Agudo de Montaña (MAM)', donde baja el tenor de oxígeno y se provoca un edema, un encharcamiento de los bronquios que produce una insuficiencia respiratoria", explicó.
En este sentido, diferenció a un chico de un adulto: "El chico entra en falla cardíaca por falta de oxígeno. Los adultos entran en falla cardíaca pero porque comienza a fallar el corazón. A los chicos no les sucede esto porque tienen el corazón sano, salvo que tengan una malformación o una patología".
Las montañas libres
Nicolás García, prestador de servicios del Parque Nacional Aconcagua y que ha hecho cumbre, reafirmó que si un menor quiere subir está "legalmente habilitado por un juez, permitido y avalado por las normas constitucionales".
"Antes venía menos gente pero se morían más personas. Ahora que asiste más gente, se mueren o quedan en situación de alto riesgo menos personas. De todas las cosas que funcionan mal en Aconcagua, que son un montonazo, el sistema de protección de los montañistas funciona muy bien", manifestó.
"Entre la coordinación, entre la parte estatal (patrulla de rescate, servicio médico y guardaparques) y la parte privada (guías de las empresas) se evitan un montón de situaciones y se solucionan otras como la del chico", detalló.
"No te piden certificado de salud previo ni te piden experiencia previa. Sí hay que hacer los chequeos médicos obligatorios en los campamentos base. Los extranjeros tienen que tener un seguro obligatorio de evacuación, una cobertura que no signifique un gasto para el estado. Cada extranjero paga una buena cantidad de dólares para ingresar, con lo cual, en algún punto, paga y avala las eventuales circunstancias", sumó.
El primer control médico, por ejemplo, está en Confluencia a tres horas de caminatas de Los Horcones, a un poco más de 3.000 metros.
Para García, "un chico de 13 o de 15 años puede llegar a hacer cumbre. Las montañas tienen que ser libres: no estoy de acuerdo con que se regule el ascenso. Si quiere subir un chico de 15 años que es montañista, que tiene criterio, que tiene experiencia y que va a ir con un guía, a mí me parece perfecto".
"También estoy de acuerdo que exista un seguro que evite un costo para la sociedad en estos casos de emergencia", finalizó.