Insólito: el técnico dispuso su cambio, pero el arquero no quiso salir

Una situación inédita se vivió en el final del encuentro que disputaron Chelsea y Manchester City por la Copa de la Liga inglesa.

El 0 a 0 no se movía y el partido se iba de manera inevitable hacia la definición por penales. Por eso el técnico del equipo de Londres, Maurizio Sarri, decidió que su arquero dejara el campo de juego.

Es que Kepa Arrizabalaga aquejaba una molestia física y por eso el entrenador prefería que para la definición ingresara el argentino Wilfredo Caballero.

Pero la modificación no se llegó a concretar nunca. El portero, es una actitud nunca vista en el profesionalismo, se negó a salir de la cancha. Pese a las insistencias del técnico y al consejo de sus compañeros, Kepa no se movió.

Caballero, que no entendía nada, estuvo unos segundos al costado del campo y luego se sentó. Así mismo, Sarri se llenó de ira y hasta amagó con retirarse al vestuario.

Finalmente el arquero titular no desistió de su postura, desacreditó la decisión del entrenador, se quedó para los penales, atajó uno y su equipo fue eliminado en una historia que dejará mucha tela para cortar.

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