Este lunes, el imputado por el crimen de las hermanas israelíes, orinó el tribunal, negó su nombre y desconoció su edad.
Para la fiscal, la estrategia de Gil Pereg es "hacerse el loco"
Nicolás Gil Pereg negó su nombre en la Sala 4 de Tribunales durante este lunes y además dijo no recordar su edad, además de orinar en el lugar y afirmar tener 37 hijos, por sus gatos.
Para la fiscal del caso, Claudia Ríos, el hombre -imputado por el crimen de su madre Pyrhia Sarusi y su tía Lily Pereg- está llevando adelante una estrategia para hacerse "pasar por loco" y quedar como inimputable.
"Dice que no recordaba cómo se llamaba, que no se acordaba la fecha de nacimiento. No sabe dónde vive. Hoy no sabe nada. Es una estrategia para, entiende este Ministerio Público para, evadir o para confundir o para que uno crea que es inimputable", manifestó Ríos.
Según un adelanto de examen psiquiátrico, que "se realiza sin perito de partes, ya que la defensa sólo ofreció perito para la pericia psicológica, ubicaron que esta persona está ubicada en tiempo y en lugar. Ha dado varios argumentos. Los cincos psiquiatras que lo han entrevistado, con las circunstancias personales que se le preguntaba, dijo que se llamaba Floda y también da el segundo nombre que dado vuelta es Hitler", dijo la fiscal a Canal 7.
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Además, la fiscal cree que "existe un elemento de condición suficiente para entender que el señor es autor de la muerte de su madre y de su tía".
"Es una persona que tiene cinco sociedades a su nombre, junto con Pyrhia, que es la mamá, y juntos a algunos abogados. Tiene una deuda de cheques sin fondos, rechazados por más de 9 millones de pesos. Tenemos también el riego procesal de la cantidad de identidades que él se hacía pasar. El riesgo procesal de la fuga es evidente. Todas las pruebas que tenemos reunidas dan elementos para que se dicte la prisión preventiva y así se ha solicitado", manifestó Ríos a Canal 7.