La víctima se desangró por un corte en la carótida.
El femicida de Las Heras le dio 33 hachazos a su pareja
Este domingo por la mañana se produjo otro femicidio en Mendoza. Liliana Ramona Olguín, de 49 años, fue asesinada por su ex pareja, Luis Alberto Sosa, de 54 años. La asesinó con un hacha de cocina, de esas para golpear carne y otro tipos de alimentos. Fueron 33 las lesiones que tenía la víctima en su cuerpo, pero una le ocasionó la muerte.
El crimen sacudió al barrio Espejo, de Las Heras. En la calle 3 de Febrero 872 ocurrió el femicidio que al parecer Sosa ya tenía decidido cometer en algún momento.
Fuentes judiciales le confiaron al POST que familiares de la víctima declararon que "durante las fiestas, en diciembre, él dijo que la iba a matar". Y lo cumplió.
Liliana era víctima de violencia de género según esos mismos familiares pero ella nunca denunció a su pareja "por temor", señalaron. Las escenas de celos, amenazas y golpes eran frecuentes.
Estaban separados pero vivían juntos. Ella tenía 6 hijos.
Este domingo por la mañana el femicida cumplió su promesa. En la cocina de la vivienda de ella, Sosa tomó un hacha pequeña de uso gastronómico, que se utiliza para cortar y golpear carne, y le pegó a la víctima hasta cansarse, hasta verla inconsciente.
Las fuentes judiciales consultadas indicaron que Liliana tenía 33 lesiones en su cuerpo, algunas cortantes, otras punzocortantes y otras contusocortantes. "La herida que le provoca la muerte la que sufrió detrás del mentón, entre la mandíbula y la oreja. El agresor la golpeó en esa zona con tanta fuerza que le quebró la mandíbula y le produjo un corte que llegó hasta la carótida. La mujer se desangró porque no tenía sangre en el corazón", detalló la fuente.
El femicida se abstuvo de declarar. Utilizó su derecho a guardar silencio cuando la fiscal que tiene a cargo la investigación, Claudia Ríos, le imputó el delito de femicidio agravado por el vínculo.